Integrantes del colectivo Ladxido Muxe “Corazón afeminado”, que radican en la Ciudad de México, acudieron a las escalinatas del Congreso capitalino, ubicado en los cruces de las calles Donceles y Allende, en el Centro Histórico, para exigir a los legisladores que busquen un mecanismo con el que se respeten los derechos económicos de los pueblos indígenas.
En ese sentido, el grupo de muxes y triquis instaló una carpa blanca y varios enlonados en donde ofrecen sus artesanías a la venta sin interferir el paso peatonal y vehicular.
Con esta acción, buscan que algún legislador se apersone con ellas y puedan buscar subir al pleno una legislación que permita regular la instalación de este gremio en las calles del Centro Histórico con el fin de ejercer su actividad comercial sin ser retirados por la autoridad.
El grupo de comerciantes fue retirado de los arcos de gobierno a principios de la pandemia y aseguran que las más de 500 muxes y triquis que migraron a la capital desde hace más de 3 años, no tienen ingresos pues la autoridad les impide comercializar sus artesanías
"Nos vamos a quedar aquí plantadas en el congreso hasta que los diputados salgan y nos escuchen, hasta que la ley del comercio público contemple como personas migrantes, exigimos que nos devuelvan un espacio de trabajo, queremos estar en la zona económicamente activa", señaló Naomi Méndez Romero, integrante del colectivo Ladxido Muxe.
IM
