A más de un año del inicio de restricciones a causa del covid-19, el confinamiento ha traído consigo, una serie de trastornos y fenómenos a los cuales el ser humano no había sido expuesto, uno de ellos es el Efecto Lipstick, el cual consiste en que los consumidores dejan de comprar artículos de lujo y comienzan con la adquisición de bienes o servicios que alimenten su autoestima.
“Le llaman el efecto lipstick, buscan algo que les haga sentir bien, que les recupere esa frescura que tenían antes de la pandemia. Se fueron de vacaciones porque están hartos de estar encerrados. Pero ahora regresan de la vacación y no se ven bien, no les gusta esto y el otro y hacen que empiece otra vez a repuntar la cirugía plástica”, sostuvo el cirujano plástico José Achar.
En entrevista con MILENIO, el doctor aseguró que con el trabajo en casa y demás restricciones por el confinamiento, mujeres y hombres buscan cirugías para verse mejor.
“La gente quiere grandes cambios, pero busca inicialmente pequeños, quieren a lo mejor una aplicación de botox, un pequeño relleno de surcos, o una cirugía de párpados, tal vez la nariz, no grandes liposucciones”, dijo.
Agregó que, en la actualidad, las redes sociales han agravado que las personas busquen la aceptación de la sociedad.
“Las redes sociales son armas de dos filos. En ese momento le aseguro que va a detonar de una manera increíble este efecto, cuando ya todos estemos vacunados”, afirmó.
Por ello, José Achar recomendó que, antes de tomar decisiones radicales hay que realizar un juicio profundo de la situación.
“La recomendación más importante es estar en familia, eso es lo más importante, de todo, eso es lo que yo recomiendo”, remarcó.
RLO