Al tomar posesión como presidente nacional del PAN, Ricardo Anaya clasificó como una burla y ofensa a los mexicanos la resolución de la Secretaría de la Función Pública, que concluyó que no hay conflicto de interés en la compra de casas del presidente Enrique Peña Nieto, su esposa Angélica Rivera y el secretario de Hacienda, Luis Videgaray.
Anaya adelantó que no se quedarán “de brazos cruzados” y llevarán el caso a la Fiscalía Especializada en Combate a la Corrupción de la PGR.
“Cómo puede ser que sea un empleado (Virgilio Andrade) quien absuelve a su jefe. Es una auténtica burla que ofende a los mexicanos y confirma la impunidad en nuestro país (...) México ya no aguanta a este PRI corrupto y corruptor”, dijo Anaya en su primer mensaje como presidente nacional panista.
Comentó que las dos prioridades para la próxima legislatura en el Congreso serán sacar las leyes secundarias del Sistema Nacional de Corrupción y revertir la reforma fiscal, que, reclamó, llevó al país a una crisis.
Anaya reta a López Obrador a un debate
Ricardo Anaya también se dirigió al líder de Morena, Andrés, Manuel López Obrador, a quien llamó líder mesiánico. Lo retó a un debate bajo sus términos, pero con la condición de que “no mande a uno de sus empleados”.
“Trabajaremos todos los días para ganar 2018”, concluyó el panista.
