El Pleno de la Legislatura mexiquense aprobó reformas al Código Civil de la entidad para que los adultos mayores que decidan donar sus inmuebles lo hagan con una cláusula de usufructo vitalicio sobre el bien o bienes que les permita permanecer en ese lugar, si así lo desea, hasta su muerte y revocar la donación en caso de “ingratitud”.
A propuesta de la diputada Iveth Cacique, se busca proteger a las personas mayores de 60 años de su propia familia o de conocidos que reciben en vida diversos bienes y al sentirse seguros, con los documentos lo echan a la calle, les dan muy maltrato o no los apoyan a atender sus problemas de salud, ocasionándoles mayor problema.
Las personas mayores de 60 años son consideradas por la ley como un grupo vulnerable por la falta de independencia económica, el padecimiento de enfermedades, discriminación social, baja autoestima, maltrato físico, sicológico y a eso se suma incluso, el despojo del último bien que les quedaba, bajo engaños, valiéndose de la confianza o parentesco.
“Encontramos que uno de los abusos más frecuentes en contra de los adultos mayores, consiste en el despojo de sus bienes por parte de sus familiares, pues en ocasiones y con la finalidad de evitar cargas onerosas como las derivadas de realizar un testamento o contrato de compra-venta, estos optan por la realización de contratos de donación en favor de sus familiares o conocidos, los cuales suponen menores cargas económicas”.
Con este ajuste legal ahora se podrá revocar esa donación por causa de ingratitud en cualquier momento, es decir de manera vitalicia para que pueda permanecer ahí hasta su muerte y se elimina el plazo de un año.
KVS
