¡Ya basta de tantos asesinatos!, dijo el obispo de Ciudad Altamirano, Maximino Martínez Miranda, después del secuestro y asesinato del sacerdote Gregorio López Gorostieta.
En la Diócesis de Altamirano, Martínez Miranda hizo un llamado a las autoridades federales y estatales para que esclarezcan el crimen cometido contra López Gorostieta y otros ciudadanos que han sido víctimas de la violencia.
"Sabemos que vivimos momentos de violencia, que a pesar de tanta vigilancia siguen ocurriendo sucesos trágicos que consternan a todo el pueblo de Dios. Nosotros decimos ya basta de tanto dolor y tantos asesinatos, de tantos odios. Basta ya de la delincuencia, de tantas extorsiones y de todos aquellos que promueven inequidad y destrucción", expresó.
Retomó parte del mensaje del papa Francisco, sobre todo la parte en que se dirige a los que engendran violencia para que se dejen tocar por Dios y así conviertan sus corazones de piedra en órganos que los acerquen a la humanidad.
El padre Maximino tiene ocho años al frente de la Diócesis de Pungarabato, llegó procedente del Estado de México, a su llegada hubo quienes le advirtieron sobre la situación de violencia que se padecía en la zona; sin embargo, reconoce que no imaginó el nivel de descomposición que actualmente se vive.
"Aquí se vive lleno de conflictos y de violencia, hay mucha gente que no tiene sentido su vida y que vive en el mal, hacemos un llamado muy especial para ellos, para que rectifiquen", destacó.