Dos jóvenes paramédicos de la Cruz Roja de Torreón ayudaron a una mujer a dar a luz en su casa, luego de que no pudo llegar a tiempo al hospital.
Ocurrió alrededor de las 10:23 horas de este sábado, en la calle Judith, en el Fraccionamiento Anna.
La joven madre, Francisca Lizeth de 23 años, comenzó labor de parto de su quinto hijo alrededor de las 07:00 horas, cuando las contracciones se hicieron más fuertes y pidió ayuda a sus vecinas, quienes llamaron al 911.
Paramédicos de la Cruz Roja acudieron a la casa, y fueron los técnicos en urgencias médicas Nohemí Castruita y Yair Mijares quienes atendieron a la mujer.
A los pocos minutos de llegar al domicilio, recostada sobre su cama, Francisca dio a luz a un pequeño niño con ayuda de los paramédicos.
Yair cargó y limpió al bebé mientras Nohemí pinzó y cortó el cordón umbilical, realizando además los masajes y el estimulamiento al pequeño.
Después de revisar al bebé, los paramédicos encontraron que estaba sano y estable, por lo que le pusieron un pañal, lo arroparon y junto con su madre los trasladaron al Hospital General de Torreón.
Este parto no es el primero para ninguno de los dos técnicos en urgencias médicas, pues Nohemí de 21 años y estudiante de la licenciatura en Enfermería, ya ha atendido dos nacimientos con anterioridad, ambos en casas donde una niña y un niño nacieron en perfecto estado de salud.
Para ella, ambas experiencias fueron gratificantes y algo completamente nuevo.
"Se siente raro pero bonito, el ser parte de una nueva vida, apoyar a la madre con su bebé, cortar el cordón como en esta ocasión fue algo muy bonito", comentó Nohemí quien pertenece a la Cruz Roja desde hace cuatro años.
Por su parte, Yair a sus 23 años y con una carrera en Gastronomía terminada, ha atendido ocho partos, de los cuales tres fueron en ambulancia y cinco más en casas, ayudando a nacer a seis niños y a tres niñas, ya que en una ocasión el embarazo fue de mellizos.
La anécdota que Yair más recuerda en este tipo de situaciones, es cuando un bebé nació sin vida y ellos realizaron maniobras en el traslado a la Clínica 16, donde llegó con signos y pudo ser reanimado con éxito, una sensación que el paramédicos describió como extraña, con nervios, pero feliz de traer al mundo una nueva vida.
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