Tres hombres armados con cuchillos y uno con una pistola, encapuchados ellos, asaltaron una tienda Bodega Aurrera y se apoderaron de unos 2 mil pesos en efectivo, mercancía diversa y los aparatos de videograbación en el municipio de García, en Nuevo León.
Trascendió que el negocio afectado ha sido robado en repetidas ocasiones, pues en promedio una vez al mes es "visitado" por los delincuentes.
Los hechos ocurrieron momentos después de las 08:00 horas del viernes en las calles San Martín y San Román, en la colonia Villas de San Martín.
Despojan a trabajadores y clientes de celulares
En el lugar, al menos dos trabajadores y dos clientes fueron despojados de sus pertenencias, como carteras y teléfonos celulares.
Las víctimas relataron que los delincuentes estuvieron, durante varios minutos, intentando abrir la caja fuerte, de la cual los empleados no cuentan con llave.

Al no conseguir su propósito decidieron saquear la caja registradora, y además apoderarse de diversa mercancía.
Enseguida salieron corriendo hacia un terreno baldío que se ubica a un lado de la tienda, donde posiblemente abordaron algún vehículo para emprender la huida.
Las autoridades no pudieron obtener, al menos por el momento, imágenes de los asaltantes, pues ellos también se llevaron el DVR del sistema de grabación.
Cajera se desmaya durante asalto en tienda en Guadalupe
Cámaras de vigilancia captaron un asalto en una tienda de la misma cadena en el municipio de Guadalupe.
El robo ocurrió en el supermercado ubicado en Camino Real y Julio César, en la colonia Camino Real.
En el video se observa al hombre acercarse a una de las trabajadoras, mostrarle el arma e intercambiar algunas palabras, por lo que la empleada se retira del sitio.
El presunto ladrón se dirige hacia una de las cajeras, muestra de nueva cuenta la pistola y hace señas de silencio a los clientes que estaban pagando sus artículos.
Por la impresión, la cajera se desmaya mientras que otra de sus compañeras va por las llaves para abrir las cajas registradoras.
El delincuente se apodera de los billetes de ambas cajas y una de las trabajadoras colocó las monedas en bolsas para entregárselas y tras obtener todo el dinero, se retira de la tienda.
Durante los minutos del robo, los clientes esperaron en la fila sin moverse ni hacer ruido, en tanto que en los pasillos se observa a más personas realizando sus compras sin percatarse de los hechos.
dat