En enero de 2019, el presidente Andrés Manuel López Obrador anunció una inversión de 3 mil 847 millones de pesos para inhibir el robo de hidrocarburos, pues ese dinero serviría para programas sociales.
El ex mandatario aseguraba en esa nota de mis compañeros Omar Brito y Janet López, que la pobreza orillaba a los ciudadanos a dedicarse al huachicoleo, porque las autoridades priistas los habían olvidado.
Para este programa especial que ayudará a un millón 688 mil personas, además del Estado de México, se beneficiarían la Ciudad de México, Guanajuato, Hidalgo, Jalisco, Michoacán, Puebla, Querétaro y Veracruz.
Cinco años después, estas mismas entidades siguen liderando las tomas clandestinas, a pesar de los esfuerzos del gobierno por abatir la extracción ilegal de combustible.
Un año antes (octubre de 2018), López Obrador declaró que iban a combatir la corrupción de "arriba y abajo", y dio por un hecho que ya no habría huachicoleros porque además sería tipificado como delito grave.
Desafortunadamente para el país, las cifras del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (Sesnsp) de enero a la fecha echan abajo la estrategia de la 4T, pues Puebla sigue estando en los primeros lugares en ese delito.
Esto quiere decir que los delincuentes siguen teniendo la complicidad de funcionarios de alto nivel en Petróleos Mexicanos, ya que esta práctica ilegal sigue muy vigente.
El reporte del Sesnsp revela que de los casi cinco mil delitos a nivel nacional, 703 se cometen en territorio poblano, lo que refleja una realidad que sigue presente en el país a pesar de los esfuerzos oficiales.
Esa sigue siendo una deuda con la sociedad, porque en el caso de nuestra entidad, esa actividad ilícita genera violencia en los municipios del llamado Triángulo Rojo, donde sigue fuera de control.
La inseguridad es otra de las asignaturas pendientes, en un país donde el crimen organizado parece estar superando a las autoridades en esta batalla, aunque todavía esperamos que al final la guerra sea ganada por los buenos mexicanos.
