Es tanto el cinismo que carga Arturo Zaldívar, ex ministro de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, que ha sido capaz de mentir una y otra vez con tal de quedar bien con el presidente López Obrador, sin importarle un céntimo su dignidad.
Y es que al pedir juicio político en contra de la presidenta de la Corte, Norma Piña, el hoy asesor de la campaña de Claudia Sheinbaum, aspirante de Morena a la Presidencia de México, reiteró que es un personaje taimado, frívolo, sin sentimientos y dispuesto a todo con tal de ser copartícipe del controversial poder fáctico.
Hoy que se cura en salud, no hay que olvidar que Zaldívar Lelo de Larrea litigó hace 18 años en el máximo tribunal del país a favor del rescate bancario, el llamado Fobaproa, creado por el gobierno de Ernesto Zedillo, a pesar de las ilegalidades cometidas por diversas instituciones financieras y que fueron combatidas con vehemencia por el entonces candidato perdedor del PRD a la primera magistratura del país, Andrés Manuel López Obrador.
Antes de ser convertido en ministro de la SCJN a finales del 2009 por designios de Felipe Calderón, entonces presidente de México, Zaldívar fue el abogado autorizado por los bancos para litigar ante el máximo tribunal la demanda de amparo que promovieron contra la Auditoría Superior de la Federación (ASF), que buscaba reducir el costo de la deuda contraída por decreto de Zedillo.
Ver para creer, ese jurista que incluso se autoproclama "impoluto e incorruptible", litigó en contra de los intereses personales y de muchos millones de mexicanos, ese innombrable Fobaproa, que según el propio López Obrador ha sido el peor saqueo a México desde tiempos de la colonia.
Y ahí estuvo en ese litigio el propio Zaldívar Lelo de Larrea que hoy invoca a sus protectores ocasionales de Morena para manifestarse como un ser probo, sin mácula y con un historial que lo sitúa casi en un altar para ser elevado a santo.
¡Claro que no! Arturo Zaldívar, quien se significó en su ejercicio como ministro presidente de la Corte por su servilismo con AMLO, hoy sugiere un juicio político a su sucesora "por utilizar la Corte de manera descarada y de forma electorera"
Espera que de un plumazo se le olviden todos los favores que hizo para quedar bien con su jefe máximo y mentor hasta el día de hoy. No se ve halagüeño el futuro inmediato de Zaldívar como asesor de Claudia Sheinbaum, ya que él y sólo él, se puso la soga al cuello al gritar a todos sus detractores que es un hombre íntegro a prueba de cualquier detector de mentiras.
Y ahora que los senadores panistas ejerzan su derecho para abrirle un juicio político en la máxima tribuna del país, sus hoy correligionarios y aplaudidores lo dejarán al garete, como ocurre en México, la única nación que se redescubre cada seis años por el presidente de la República en turno. Hoy lo sabemos muchos millones de mexicanos. No habrá excepciones. En el breve tiempo lo corroboraremos.
