Leo la página 34 del libro, “Diario de una transición Histórica”, firmado por la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo, en donde dice que el triunfo en 2022 de Américo Villarreal Anaya, se complicó por el juego sucio de Francisco García Cabeza de Vaca, quien promovió “órdenes de aprehensión contra toda su familia para amedrentarlo”.
Viene a cuento la cita anterior, porque la irrupción de Morena en los comicios de 2021, sacudió la zona de confort en la que se encontraba Cabeza de Vaca quien, hasta ese momento, pensaba que podía heredar la gubernatura a su hermano Ismael, como candidato del PAN en la sucesión de 2022.
Pero una bofetada de 580 mil votos, que le dieron a Morena y al PT el control del Congreso, lo despertó del sueño guajiro, obligándolo a destapar a César Verástegui Ostos, a finales de junio de 2021.
Antes de que iniciara la 65 Legislatura, el uno de octubre de 2021, en donde el PAN tendría solamente 13 de las 36 curules, Cabeza de Vaca ordenó la aprobación de una serie de reformas constitucionales y legales, así como la designación transexenal de personas afines en instituciones claves, para que le cuidaran la espalda si Morena ganaba la gubernatura en 2022.
Entre junio y septiembre de 2021, el Jefe de la Oficina del Gobernador, David Cerda Zúñiga, se convirtió en magistrado y después en presidente del Poder Judicial. Javier Castro Ormaechea llegó también al STJ, siendo relevado en la Fiscalía Anticorrupción por Raúl Ramírez Castañeda, titular de la UIFE.
La Unidad de Inteligencia Financiera pasa a la Fiscalía General de Justicia, custodiada por Irving Barrios Mojica. El Tribunal de Justicia Administrativa lo preside Edgar Uriza Alanís, representante del PAN ante el IETAM, mientras que, a la presidencia del Instituto de Transparencia llega la ex dirigente estatal panista, Adriana Rocha Sobrevilla, y en la Auditoría Superior lo protege Jorge Espino Ascanio, ex candidato blanquiazul a síndico de Reynosa.
Una vez que Govea, Willy, Gracia o Córdoba releven a Irving en la FGJ, en diciembre próximo, a Cabeza de Vaca solo le quedará como guardián el TJA, en donde Alejando Guerra Martínez y Gerardo Aldape Ballesteros, también nombrados magistrados entre junio y septiembre de 2021, representan los últimos acólitos de su parroquia.