Es algo muy frecuente que cuando un escritor tiene un gran éxito de crítica y lectores, las editoriales hurguen en lo profundo de sus cajones para extraer cuanta obra consideren susceptible de comercializar. Esta autora argentina ha ganado enorme reconocimiento como cuentista a través de Los peligros de fumar en la cama y Las cosas que perdimos en el fuego, pero también es excelente novelista, como lo demostró en Éste es el mar. Ya nos comen las ansías por adentrarnos en Nuestra parte de noche, la novela de largo aliento que le hizo merecedora del Premio Herralde 2019.
Pero antes de que la obra galardonada comenzará a circular en librerías mexicanas, la UNAM junto a Editorial Antílope decidieron sacar una versión nacional de Alguien camina sobre tu tumba, que reúne crónicas a partir de sus visitas a cementerios; ello debido también a una ilustre carrera como periodista y sus inclinaciones hacia lo oscuro. Y en modo alguno resultó un libro menor, Mariana, nacida en 1973, es explosiva y profunda en cualquier género. Sabe cómo combinar elementos de los libros de viaje, el calado del ensayo y su gran capacidad narrativa para concebir estos textos mutantes y escurridizos. Tan sólo por los apartados dedicados a La Habana y Nueva Orleans valdría la pena este libro excéntrico y delicioso, pero hay mucho más. ¡Vaya que sabe destacar de los cementerios su parte poética y sensual! Va mechando en la prosa datos históricos con el fluir propio de un cuento, aunque sepamos que todo aquello ocurrió de verdad. En este libro la acompañamos a través de Graceland y el fantasma de Elvis para luego perdernos en la provincia argentina y sus construcciones delirantes. Su búsqueda de panteones interesantes se extiende de Australia a Lima, haciendo escala en Guadalajara, Jalisco. Alguien camina sobre tu tumba es peculiar, seductor y está escrito de manera impecable.
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