No es justo que la vida nos haya programado para triunfar, y que vivamos cada día subutilizando nuestro “Verdadero Potencial”. No es justo que la naturaleza nos haya dado las mejores herramientas para alcanzar el éxito y vivamos inmersos en la mediocridad.
No es justo que la vida nos haya dotado con la mente -para albergar pensamientos positivos y retos que conquistar- y dejemos abierto ese “privilegio” a creencias limitantes y negativas.
No es justo que culpemos a otros de lo que nos ocurre, cuando estamos preparados física y mentalmente para asumir la responsabilidad de convertir cada problema en un escalón para seguir ascendiendo en la vida... Cumplamos con nuestra responsabilidad, definamos nuestra misión de vida y alcancémosla.
No es justo que una persona que dispone de los recursos fundamentales para disfrutar de una vida plena, nazca, crezca y muera sin saber siquiera, para qué y por qué paso por la vida. Hoy es el momento propicio para empezar a hacerlo. No se trata de pagar un peaje por el tiempo de permanencia entre los vivos, se trata de vivir plenamente y de alcanzar lo máximo en todo lo que decida emprender.
Pero si siente que no vale la pena pagar el precio y experimenta vergüenza por gritar al mundo su decisión de alcanzar la excelencia en todo lo que hace, entonces téngalo por seguro... esa no es su misión.
Asienta que aún y cuando haya considerado que ya es demasiado tarde y que no vale la pena emprender algo nuevo, la responsabilidad de cambiar, es sólo suya, qué es sólo usted quien tiene la libertad y la responsabilidad de cambiar. Convénzase que nunca es demasiado tarde para emprender aquello por lo que usted considera que “está aquí”.
Y si está "mentalmente dormido", ¡Despierte!, sea consciente: Que mientras tenga vida, siempre estará a tiempo. Que quizá no llegue lo lejos que hubiese querido. Que lo más lo importante es que reaccionó y emprendió ese viaje -su viaje- y que en el momento de su última exhalación, estará cierto y satisfecho de haber tenido el valor de recorrer, a su manera, el camino que le pertenecía. Autor anónimo.
Amigo lector, ¡Actúe ya! Defina sus metas y salga a conquistar sus sueños. Usted ¿qué opina?