Si Gil ha leído bien las noticias de sus periódicos y visto la televisión atentamente, la marcha del sábado ha sido una multitudinaria expresión de descontento: “Generación Z”, cualquier cosa que esto quiera decir, adultos, jóvenes, diversas clases sociales, caminaron para manifestar su malestar en contra de Claudia Sheinbaum y Morena. Un gobierno menos sordo atendería estas señales, pero no éste. La Presidenta, principal promotora de la marcha, afirma que la derecha y ultraderecha de México y el mundo han impulsado esta concentración, que todo se ha organizado mediante bots y que ha costado 90 millones de pesos. Resultado: el sábado marchan una cantidad indeterminada de inconformes con este gobierno.
Efectivamente, en el Zócalo hubo enfrentamientos. Un grupo de encapuchados derribó las bardas de metal y la policía respondió con gases lacrimógenos. Gil no quisiera ponerse pesado, pero ha preguntado aquí en esta página: ¿por qué no los han detenido, acusado y presentado? Pues porque probablemente salen de los sótanos de Morena.
Deustche Welle ha informado al mundo que en la Ciudad de México la marcha dejó un saldo de 20 civiles y más de 100 policías heridos, así como una veintena de personas detenidas, luego de un enfrentamiento entre las autoridades y elementos encapuchados en las puertas de Palacio Nacional, sede del Ejecutivo.
El secretario de Seguridad Ciudadana de la capital, Pablo Vázquez, informó en rueda de prensa que las personas arrestadas fueron presentadas al Ministerio Público tras provocar “actos violentos” durante la manifestación en el Zócalo capitalino, y que otras 20 están siendo remitidas por “faltas administrativas”.
Z
Oigan, ¿lo de la Z es por el Zorro? En serio, caramba, no es vacilada. Pablo Vázquez explicó: “Estamos trabajando en la identificación de todas las personas que cometieron actos constitutivos de delito en la manifestación, e iniciando las carpetas de investigación correspondientes en coordinación con la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México”.
Ahora mal sin bien, ¿no hubieran podido hacer ese movimiento estratégico antes de la marcha? Pues no. Total: 60 uniformados lesionados recibieron atención en el sitio y 40 fueron trasladados a hospitales, 36 de ellos por contusiones, cortaduras y lesiones menores y cuatro que reciben atención especializada por traumatismos, que no ponen en riesgo su vida. Nos fue muy bien, sigamos así, los violentos golpean a la policía y luego se van a sus casas. El mundo del revés.
BBC
El portal de la BBC informó así: al menos 120 personas, 100 de ellas agentes de policía, resultaron heridas en los enfrentamientos durante las protestas contra el gobierno en Ciudad de México, según informó la policía. Miles de manifestantes salieron a las calles de la Ciudad de México para protestar contra la inseguridad y el gobierno de la presidenta Claudia Sheinbaum. Vistas así las cosas, a la Presidenta no le fue bien. La concentración fue convocada por grupos juveniles de la “Generación Z”, y contó con el apoyo de ciudadanos que exigen respuestas por asesinatos de alto perfil, entre ellos el del alcalde de Uruapan, Carlos Manzo, ocurrido hace sólo unas semanas. Él había pedido mano dura contra los cárteles.
Sheinbaum afirmó que las marchas, que también se llevaron a cabo en otras ciudades, fueron financiadas por políticos de derecha que se oponen a su gobierno. El sábado, los manifestantes retiraron partes del vallado que protege el Palacio Nacional, donde reside la Presidenta, y la policía, que custodiaba el recinto, utilizó gas lacrimógeno contra los grupos.
Días antes de la marcha, la mandataria aseguró que la manifestación estaba siendo fomentada por bots en internet: “Estamos de acuerdo con la libertad de expresión y de manifestación si hay jóvenes que tienen demandas, pero la cuestión aquí es quién está promoviendo la manifestación”. Satanás, Presidenta, Satanás.
Gil pregunta: ¿la aprobación de la Presidenta sigue viento en popa? Tal vez no.
Lo veremos.
Todo es muy raro, caracho, como diría Tácito: “Quien se enfada con las críticas reconoce que las tenía merecidas”.
Gil s’en va