El domingo se llevará a cabo el último debate presidencial. Xóchitl Gálvez, candidata de la coalición Fuerza y Corazón por México, llega con un ligero aumento en intención de voto en las encuestas. Después del segundo debate se ha visto a una Xóchitl más segura y con confianza, sus intervenciones en los medios de comunicación y discursos en los mítines partidistas reflejan a una Xóchitl que va por todo.
En las últimas semanas la narrativa de la candidata presidencial opositora hacia MORENA ha sido la de ponerlo como un narco partido, llamando a Sheinbaum, por consiguiente, “narcocandidata”. Y es que los niveles de violencia en el país se encuentran en niveles alarmantes, niveles parecidos a los que tenía Felipe Calderón. En algunos estados de la República la situación es insostenible, los asesinatos están a la orden del día. El proceso electoral vigente no ha sido ajeno a la violencia, ya van 20 candidatos asesinados en lo que va de la contienda.
Sheinbaum se sabe ganadora, cuenta con el respaldo de un partido oficial mayoritario, tiene a su favor el tener a un presidente de la República con el 60% de aprobación ciudadana. Pero no todo es miel sobre hojuelas. El mal manejo de la violencia por parte de los gobiernos morenistas es innegable, por lo que se verá el día la elección que tanto pesará dicha situación. Los estados del sur, gobernados por MORENA, han permitido que el crimen organizado gobierne de facto en varios municipios.
Jorge Álvarez Máynez, candidato de Movimiento Ciudadano, se ha mantenido en su discurso de derrotar a la vieja política. La campaña del partido naranja se enfoca en la atracción de voto joven. Sin duda alguna es la mejor campaña en cuanto a redes sociales, han sabido utilizar a su favor el marketing político para posicionarse como partido nacional, aunque difícilmente les alcanzará, al menos en esta elección, para ganar la presidencia.
Todas las casas encuestadores le dan una ventaja amplia a Claudia Sheinbaum frente Xóchitl Gálvez, algunas por diferencia de 20%, otras de 10%, pero como bien dicen, las encuestas son solo un reflejo del momento y hasta el día de las elecciones conoceremos quién será el próximo presidente de la República.
