Que la secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero, fue ayer notificada de la posposición de su comparecencia ante comisiones de la Cámara de Diputados cuando estaba a punto de arribar a San Lázaro, por lo cual fue hasta las puertas del recinto, bajó de su camioneta y se dio por enterada de la decisión. Minutos antes, en un acuerdo de última hora, la Junta de Coordinación Política encabezada por el morenista Mario Delgado decidió aplazar la presentación hasta nuevo aviso, debido a que la sesión del pleno en que se discutía la extinción de fideicomisos se iba a prolongar varias horas, como fue, y exigía la presencia de los legisladores para votar.
Que como muchos legisladores no pueden estar presentes en el Senado por el tema de la pandemia, lució vacío el salón de plenos durante la comparecencia del secretario de Hacienda, Arturo Herrera, quien en momentos buscó sin éxito a quienes remitieron algunas preguntas, pero aun así respondió “por respeto”. Hasta el momento ha sido la exposición más larga, pues duró casi cinco horas, que no desaprovechó para ratificar que el dinero de los fideicomisos cancelados llegará a artistas, científicos, atletas...
Que ayer le llovió a Claudia Sheinbaum en redes sociales pero en forma de disculpas, pues quienes se mofaron un día antes de que la jefa de Gobierno llamó a los opositores del Zócalo a aclarar si lo suyo era un performance, simplemente debieron darle la razón cuando un ventarrón arrancó del piso varias casas de campaña y las lanzó por los aires en una exhibición multicolor que, dijeron algunos en Twitter, ni el Cirque du Soleil.