Que todo un relajo armó el magisterio en Tamaulipas: Avisó irse al paro de clases y en unas horas cambiar de opinión. El asunto fue la negativa de la mayoría de los profesores en respaldar la convocatoria hecha por Ulises Ruiz, particular del dirigente estatal del SNTE. Arnulfo Rodríguez lo dejó mal parado, pues aseguró “jamás dí esa orden”.
Que fue tanta la atención al tema, donde incluyó al gobernador Américo Villarreal Anaya en una reunión con el gremio, que pasó desapercibida la glosa del informe en el Congreso del Estado. Eso sí, empleados de la Secretaría del Trabajo felicitaron en redes sociales a Gerardo Illoldi por su comparecencia.
Que Nancy Ruiz, hoy regidora de Altamira y ex diputada local, recordada por abandonar a Morena para irse al PAN, está tratando de influir en la designación de la nueva titular del Instituto de la Mujer en Tampico, por lo menos, es una de las responsables de una protesta con altavoz hace días en la presidencia.
Que un curso de inteligencia emocional o de oficio político no caería mal entre algunos secretarios de la administración estatal, pues no deben ponerse a discutir con manifestantes ni exaltarse cuando les preguntan sobre señalamientos en redes sociales, sino mantener en todo momento la calma. No son todos pero sí hay quienes tienen un área de oportunidad en el tema.
Que Paloma Guillén fue una de las más molestas con las palabras misóginas y revictimizantes de Manuel Cavazos Lerma, aunque a las mujeres priistas de Tamaulipas no se les vio criticando también a los diputados federales de su partido que la semana pasada ayudaron a salvar del desafuero a Cuauhtémoc Blanco.
Que Graciela Guzmán en Bienestar Social y Martha Soraya en Desarrollo Urbano dejaron sus puestos en el Ayuntamiento de Ciudad Madero, siendo los primeros cambios en el equipo de trabajo del alcalde Erasmo González. Para el primer caso, se maneja el nombre de Orlando Morales como encargado de despacho.
