Que el Grito de Independencia y el Desfile Militar tuvo nostalgia para algunos funcionarios en el gabinete del gobernador Américo Villarreal. Apuntan en la capital Ciudad Victoria la salida de Lucía Aimé Castillo en la SET y, entrevistada, en sus palabras dio pie a una posible salida. Voces en la capital la ponen en la delegación de la SEP.
Que en Tampico sucedió algo más concreto. Chucho Nader terminó con las últimas actividades como presidente municipal, desde su último informe tras seis años, más la ceremonias por las fiestas patrias. Desde este martes se reincorporará a su curul y los trabajos parlamentarios de Acción Nacional en la Cámara de Diputados.
Que demasiado desangelado lució el festejo patrio del 15 de septiembre en Ciudad Madero. Ni los directores como tampoco la mitad del Cabildo acudieron al acto la noche del domingo, a excepción de uno que otro para acompañar al alcalde suplente Carlo González. Así de triste termina la administración de Adrián Oseguera.
Que todavía no se repone Morena del “martazo”, el diputado Marte Ruiz que dijo las mujeres violentaban a sus esposos por no tener intimidad con ellos, y ahora el legislador electo por ese partido Sergio Ojeda, dijo “viva José Ortiz de Pinedo”, en lugar de Doña Josefa Ortiz de Domínguez cuando daba el Grito en un evento privado en Nuevo Laredo.
Que el panista Rodrigo Pérez Luévano, registrado por aprobar la Reforma Judicial en Tamaulipas por salirse cuando el proyecto era sometido a consideración del Pleno y, según el reglamento, se toma como voto a favor, le pidió al presidente de la Permanente Humberto Prieto corregir su participación en el acta. Desde luego, se la negó.
Que por cierto, en la sesión del pasado domingo, Prieto Herrera cometió muchos errores al confundir palabras a cada rato mientras conducía la junta de trabajo, algo sin pasar desapercibido para quienes siguieron la transmisión en redes sociales, donde además se le veía muy relajado. ¿Serían los estragos de un sábado social?
