Que ayer durante la sesión del Consejo Estatal de Seguridad se resaltó la necesidad de mantener la coordinación entre los tres niveles de gobierno, con el firme objetivo de que el estado se siga ubicando entre las entidades federativas con mayor seguridad en territorio nacional. En este sentido, el gobernador Julio Menchaca Salazar volvió a subrayar la buena relación del estado con la 18/a Zona Militar, la Guardia Nacional y la Fiscalía General de la República, no vaya a ser que alguien piense que aquí cada quien cuida su parcela.
Que en dicha reunió se dio cuenta de 315.7 millones de pesos en seguridad y más del 90 por ciento de la Policía Estatal capacitada, como quien enseña el recibo completo para que no le pidan el ticket. En este tema prioritario para el estado no se escatima, puesto que hubo reparto para la Secretaría de Seguridad Pública, para la Procuraduría General de Justicia, para el Tribunal, para el Secretariado Ejecutivo y hasta para el Centro de Justicia para Mujeres, porque en la repartición de recursos también se mide la seriedad.
Que se dijo también que en los municipios el 70 por ciento de las corporaciones policiacas ya está certificado, avance que deja implícito que todavía hay un 30 por ciento que sigue en proceso… o esperando turno. Desde la Procuraduría se reportó una reducción en delitos como extorsión, robo de vehículo y robo a transeúnte, porque nada tranquiliza más que escuchar que los números van a la baja. Por cierto otro dato importante no mencionado ha sido la captura de importantes objetivos criminales generadores de violencia en especial en el Valle del Mezquital.
Que desde la Federación llegaron palmaditas en la espalda y ofrecimientos de acompañamiento técnico, señal inequívoca de que Hidalgo está haciendo la tarea… o al menos entregando bien el cuaderno. El gobernador Julio Menchaca Salazar fue claro al señalar que este es un tema “en donde no vamos a parar hasta que se inhiban, en mayor medida, los actos que lastiman y agreden a la sociedad”, enfatizó el mandatario estatal. La postura se aplaude, pero los resultados, al final, son los que le importan a los ciudadanos en el estado.
