Que la reunión entre el gobernador Pablo Lemus y el ex mandatario Enrique Alfaro en Casa Jalisco, durante la temporada navideña, va más allá del relato público de una simple charla entre amigos sobre fútbol y proyectos. ¡Ajá! El escenario elegido —la sede del ejecutivo estatal— y el momento estratégico, en vísperas de un año crítico, convierten este encuentro en un acto de alta política. Bajo la cómoda coartada del Mundial 2026, que requiere una coordinación férrea en seguridad, infraestructura y logística; se alinea la necesaria transferencia de experiencia y la proyección de un frente unido de cara a los enormes desafíos que Jalisco enfrentará como anfitrión global. Hasta los más cautelosos emecistas reconocen que lejos de centrarse en menús navideños, el verdadero menú de esta cita fue la gobernabilidad de Jalisco para 2026 y su inevitable sombra sobre 2027. Anótele ahí que lo más seguro es que la conversación orbitó en torno a la herencia administrativa y nuevos cambios en el gabinete, la conclusión de obras emblemáticas y la estrategia de un Movimiento Ciudadano que busca consolidar su poder en el estado. El diálogo entre el poder emecista del pasado y el del presente es clave para el proceso electoral intermedio.
Que Lemus expresó su preocupación por los acontecimientos que han opacado la imagen del Pueblo Mágico de Tequila en los últimos días. Estos incluyen las denuncias por acoso interpuestas por regidoras del ayuntamiento en contra del alcalde Salvador Rizo, así como la falta de recursos para pagar los aguinaldos a los trabajadores, lo que ha generado una crisis administrativa y de confianza. Lemus lamentó que estos hechos afecten la reputación de un municipio reconocido por su desarrollo económico y turístico, basado en la industria del tequila, e hizo un llamado a resolver los problemas internos para proteger su nombre.
Que la Secretaría de Salud de Jalisco investiga un segundo fallecimiento probable por sarampión en un menor de edad. El titular de la dependencia informó que se trata de bebés provenientes de familias jornaleras de Guerrero. En el estado suman 470 casos confirmados y el 96% de los contagios corresponde a personas sin esquema completo de vacunación.
