Que ayer el mensaje de la gobernadora Libia García frente a una oposición que se manifestó durante su toma de protesta fue de tender puentes e hizo un llamado a la reconciliación y dejar atrás los colores de los partidos pues el único color que nos debe interesar a todos es el de Guanajuato.
Pero también fue contundente al asegurar que no iba a permitir que intereses políticos particulares fueran por encima de los intereses del estado y agregó que la unidad construye, mientras que la división resta y destruye.
Que en ese llamado a la unidad dijo estar segura que la próxima Presidenta de México, Claudia Sheinbaum, tendrá una gran visión para favorecer a todos los estados del país incluyendo a Guanajuato en ese bienestar del gobierno federal.
Insistió en que los enemigos a vencer no son aquellos que piensan diferente sino la inseguridad y la desigualdad por lo que se comprometió a convertir cada palabra pronunciada en su discurso de rendición de protesta en acción y cada hecho en resultado para los guanajuatenses.
Que al iniciar su discurso ante el pleno del Poder Legislativo del estado no dejó de lado el reconocimiento de todas aquellas mujeres que han contribuido de alguna manera a formar lo que hoy es el estado como María Josefa Marmolejo de Aldama, Tomasa Estévez, María Guerrero Manrique, Carlota Bravo y las Mujeres Insurgentes de Pénjamo, Catalina Bravo de Navarro y Virginia Soto.
Pero también a aquellas que abrieron paso a las mujeres en la política como Eloísa Jiménez, la primera diputada local, sin dejar de lado a las madres buscadoras y a las mujeres, a las niñas y jóvenes que anhelan un mejor Guanajuato. Tras ello se dirigió a la Alhóndiga de Granaditas donde por primera vez en la historia una jefa del Ejecutivo rindió una toma de protesta ciudadana.
