Que trascendió que lo que pudo haber causado la molestia del ex secretario de Salud, Daniel Díaz Martínez, y le llevara a renunciar abruptamente al cargo fue que no hubiera sido tomado en cuenta para ningún cargo de elección popular en su natal Irapuato, pues primero se le descartó como aspirante a la presidencia municipal.
En esta posición aunque no se había tomado en cuenta a la presidenta municipal, Lorena Alfaro, en un principio, al final se decantaron por ella y terminaron bloqueadas las candidaturas a diputaciones locales así como la diputación federal en donde bajaron a Itzel Balderas para inclinarse por Ricardo Ortiz a quien se le veía como un opositor a las aspiraciones de la actual alcaldesa quien busca la reelección.
Que al final y después de tener una trayectoria intachable al frente del Sistema de Salud Guanajuato, con un manejo ejemplar de la pandemia contra el covid-19, la recompensa para Díaz Martínez fue dejarlo fuera de la jugada, lo que provocó la molestia de un actor al que incluso habían fichado en las filas de Acción Nacional.
Nos queda claro que la decisión de incluir al ex alcalde Ricardo Ortiz fue para evitar un choque de trenes con Alfaro y al final buscar que ambos contribuyan a mantener para Acción Nacional la prevalencia en este municipio, donde Morena, se sabe, les está pisando los talones.
Que por otra parte sabedores que una de los principales señalamientos que podría hacérsele a la ex alcaldesa de León, Bárbara Botello Santibáñez, es el tema de las denuncias penales en su contra, ayer la aspirante a la candidatura por la presidencia municipal hizo pública su carta de no antecedentes penales con la que deja claro que no ha sido sentenciada por ningún delito cometido durante su administración.
Se sabe que Botello Santibañez tiene una misión que es la de que la campaña para la panista Alejandra Gutiérrez no sea una vacación y aunque tiene complicado acceder de nuevo al cargo, podría contribuir para elevar el voto en favor de la 4T en algunos distritos electorales locales de León.