Que uno de los suspirantes por la candidatura del PAN a la alcaldía de San Miguel de Allende, Luis López, se fue duro y a la cabeza, aunque no por su nombre, contra los exalcaldes de este municipio, Luis Alberto y Ricardo Villarreal al asegurar que el ayuntamiento no pertenece a uno o dos personajes eternos, ya que existen muchos panistas bien intencionados, honestos y trabajadores.
Sin embargo, aunque se dice panista olvidado y no escuchado, se sabe que las mediciones del albiazul en la ciudad patrimonio están a la baja, tan así que la apuesta es por un apoyo implícito a la eventual reelección del priista Mauricio Trejo, ante el temor que Morena pueda colarse y gobernar otra importante ciudad del estado.
Que en el caso del municipio de Salamanca aunque en un principio el alcalde César Prieto juró y perjuró que no buscaría la elección consecutiva, parece ser que cambió de opinión y optará su clan por mantenerlo en la presidencia municipal en un lugar que se ha convertido en el bastión de Morena en la entidad.
El detalle es que a César ya le explotó el tema del descontrol en su administración y un ejemplo claro es lo sucedido en la Policía Municipal donde su ex director, un teniente del Ejército, decidió poner pies en polvorosa antes de salir quemado con la falta de liderazgo en esta importante área.
Que en Guanajuato al igual que en el Estado de México, Movimiento Ciudadano podría no participar en la elección a la gubernatura y si la indicación del centro es jugarla igual llamando a no votar en este caso por el PAN o el Frente Amplio, sabremos que se busca ganar votos para Morena.
Lo que es un hecho es que el partido en la entidad ha menguado, hoy técnicamente perdió dos alcaldías antes de la elección, pues en Moroleón aunque siguen sus siglas la alcaldesa se proclamó pro Sheinbaum y en Pueblo Nuevo el alcalde ya se les fue al PAN.
