Wagnermaníacos, bienvenidos. Me encuentro en Guadalajara después de una exitosa gira por la Unión Americana. Muy contento de estar en suelo mexicano, ya que extrañaba la comida, a la familia, y ahora me estoy dando la oportunidad de disfrutarlos al máximo.
Me siento muy entusiasmado, muy emocionado y, ¿por qué no decirlo? orgulloso de la etapa que estoy viviendo en este espacio que me brinda Grupo Milenio, y que precisamente hoy, está cumpliendo un año.
Desde entonces nos hemos encontrado semanalmente en 50 ocasiones, en las que he plasmado cada letra desde el fondo de mi corazón. Dirigiéndome a ustedes con respeto, transparencia, humildad. Esperando siempre su retroalimentación, sus comentarios, buenos, malos, no importa, porque para eso estoy aquí como parte de esta familia periodística.
Este año cumplo 36 años de luchador en activo, en pleno uso de mis facultades físicas y mentales. Siempre buscando las plataformas para estar vigente ante todos ustedes. Consciente de que la evolución y la diversificación son fundamentales para un deportista, no solamente para su desarrollo personal, sino para la globalización, en este caso de la lucha libre.
Un deporte que en ocasiones es satanizado, sin conocerlo a profundidad. Sin saber que lo sustentan atletas de alto rendimiento, profesionistas y que además es la única disciplina que representa la cultura y el misticismo de nuestro México.
Para eso estoy y estaré aquí, mientras me lo permitan ustedes queridos lectores. Todo mi agradecimiento para el Jefe de Jefes de los deportes en Grupo Milenio, Héctor González Villalba, quien fue la primera persona que creyó en mí, para desarrollarme como columnista.
Wagnermaníacos, a ustedes mi lealtad, mi cariño por acompañarme en esta aventura y, como decía Vicente Fernández, mientras ustedes no me dejen de leer, yo no dejaré de escribir. ¡Muchas gracias!
Y recuerden en mi casa, con mi gente y en Grupo Milenio se me respeta. Bien, Bien, Bien.
Dr. Wagner Jr
Twitter: @WagnerJrOficial
