¿Recuerda la cantidad de publicidad que “El Peje” usó para atacar al gobierno anterior? ¿Recuerda cómo criticó al aeropuerto de Texcoco? Pero sobre todo, ¿recuerda cuando dijo que el mentado avión presidencial, ese Boing Dreamliner que le costó cientos de millones de pesos al gobierno de aquel entonces, era un gasto estúpido, innecesario y que cuando llegara él al poder lo primero que haría sería venderlo?
Cosa que hasta la fecha no consiguió porque ni empresarios, ni países han querido comprarlo y que sigue generando un gasto al erario, porque déjeme le digo que esos más de 200 millones de dólares que costó lo seguimos pagando.
No se iba a vender por la sencilla razón de que fue desde origen una compra mal hecha, este mentado avión fue prueba de la compañía que lo fabricó, se usó hasta el cansancio, lo que lo lleva hoy en día a ser un modelo no recomendado para su compra al estar ya muy gastado.
Por otro lado, por acá don Enriquito Peña (¿se acuerda de él?) le puso hasta mármol en sus acabados, lo que hace muy caro el reacondicionarlo para uso comercial.
Era evidente que nomás no lo colocaría en el mercado, vamos, hasta la mentada rifa hizo, totalmente fuera de la legalidad por cierto, en fin, para no hacer más largo este drama, resulta que en esta semana que termina y ya dando patadas de ahogado, nuestra querida “cabecita de algodón” en un afán desesperado para evitar aceptar su error en este tema, nos dijo que lo pasará a los militares para que lo renten al mejor postor, así como lo lee, entonces, en una de esas si quiere festejar los XV años de su hija, podrá usarlo por una módica cantidad.
Ahora sí, ni que decir ante esta barbaridad, la 4T salió cara aquí.
David Aarón Cárdenasdacc_cardenas@yahoo.com.mx
