El pasado fin de semana, dentro de las instalaciones de la Canaco de Guadalajara, en el foro organizado por “Confío en México”, posiblemente la lectura política para unos fue que Salvador Zamora mostró músculo político, abarrotó el recinto empresarial como pocas veces se ha visto, y fue acompañado de notables empresarios y políticos.
Sin embargo, más allá de las muestras de apoyo que no es cosa menor, vale la pena destacar que en su presentación y en relación con la experiencia exitosa en el desarrollo económico, generación de empleo y captación de inversión extranjera directa en Tlajomulco, se observó a un Zamora seguro, maduro, inspirado y hasta emocionado.
En su presentación, algunos datos a considerar:
Según INEGI,el Valor Agregado Censal Bruto (lo más cercano al PIB municipal), en los últimos 5 años, creció en el municipio en 136%, pero si se toma como referencia desde el 2004, la cifra se eleva al 234%.
En relación con el empleo, según datos del IMSS, casi 120,000 empleos formales registrados en agosto, de los cuales, el 30% de ellosse han creado solodurante sus dos administraciones.
Al final de su administración, la inversión público-privada será de más de 50,000 millones de pesos.
Con base en estas cifras, por supuesto que Salvador Zamora tiene autoridad para hablar de cómo convertir a Jalisco en el motor económico de México.
Su propuesta es clara, a partir de la presentación de un diagnóstico completo respecto de la situación que se vive en cada una de las doce regiones en que se divide el estado, y bajo un modelo de gobernanza pública, los principales problemas a enfrentar son:
Desigualdad económica regional
Informalidad laboral
Precariedad salarial
Diseño institucional desfasado
Oferta de política pública y programas generales, no específicos para el vocacionamiento de cada región
De lo anterior, estoy convencido que, si se busca elevar la economía y competitividad de Jalisco a otro nivel, el primer paso es acabar con la desigualdad regional.
No los culpo si al escuchar desarrollo regional, los remonto a los años 80, empero si se analiza la realidad que se vive particularmente en Jalisco, por supuesto que nos orienta a reflexionar sobre si esta política ha sido implementada de manera efectiva en los 30 últimos años. Aquí algunos datos:
Guadalajara y Zapopan concentran más del 40% de las unidades económicas de todo Jalisco.
La región Norte solo representa el 1% de las unidades económicas del estado, Costa sur 2%, Sureste 2.2%, Sierra de Amula 2.2% y Lagunas 2.7%.
De los 55 ,784 nuevos empleos registrado ante el IMSS en el mes de agosto, poco más del 80% se registran solo en el Área Metropolitana de Guadalajara.
Regiones como la Costa Sur, Sur, Sureste y Valles, presentan un claro retroceso en la generación de empleo formal en el presente año.
Ante esta situación, es imperante un giro de 180 grados en la actual política de desarrollo regional, así como de desarrollo económico y empleabilidad en la entidad.
Cómo académico, felicito a Salvador Zamora por subir el tema de la desigualdad regional a la agenda pública. Cómo analista, lo felicito por su presentación y proyecto.
La vara la dejó alta, si se aspira a gobernar nuestro estado, lo menos que se puede esperar de los futuros candidatos, es un proyecto con visión, claro y definido sobre el rumbo de Jalisco en la próxima década.