Ciudad de México /
Por Horacio Vives Segl
Ilustración de Víctor Solís
La clase política quedó evidenciada en el Senado al tener que celebrarse dos votaciones para pronunciarse sobre el asunto de conceder o no la licencia senatorial: la primera que la negó, para luego llamar a una nueva votación para revertir la anterior y terminar por aprobar finalmente la polémica licencia. El Partido Verde no entendió el mandato en las urnas y uno de sus principales referentes queda evidenciado con una maniobra abyectamente burda y prevaricadora. La contraprestación fue exhibida de inmediato: cinco diputados verdes se sumaron al bloque de Morena, con lo que ya alcanzó la mayoría absoluta en la Cámara Baja del Congreso de la Unión.