Ciudad de México /
Por: Héctor Aguilar Camín
Ilustración: Patricio Betteo, cortesía de Nexos
Nuestra modernidad de fin de siglo requiere salir de la negación anticolonial y asumir y reencontrar nuestra poderosa raíz hispánica, no en lo que tuvo de exclusivismo colonial, sino en lo que tiene de mezcla y diversidad fundidas en un producto único. Es una tarea digna de nuestro mejor esfuerzo tratar de recuperar a plenitud nuestro pasado, para enfrentar con mejores recursos nuestro presente y nuestro futuro. Y los mejores recursos para ello son los que hablan en nuestra historia del contacto, la mezcla y la asimilación, los recursos de la identidad mestiza y la fortaleza cultural de la matriz hispánica, una de las más poderosas de Occidente.