Los estragos económicos a causa de la pandemia de coronavirus derivaron en el cierre de 310 restaurantes, de los cuales, 62 bajaron la cortina de manera definitiva, en tanto siguen sin recuperarse cuatro mil empleos en este sector productivo.
Así lo expuso la presidenta de la Cámara Nacional de la Industria de Restaurantes y Alimentos Condimentados (Canirac), Olga Méndez Juárez, al señalar que este sector económico ha sido uno de los más afectados a un año del primer caso de coronavirus.
Destacó en entrevista que la situación de establecimientos cerrado se agravó conforme a las restricciones de no poder ofrecer el servicio en mesa para contrarrestar la propagación del coronavirus en Puebla, así como por la inactividad en otros sectores, principalmente los educativos.
Comentó que los negocios de comida más afectados estaban cercanos a corredores universitarios, sobre todo microestablecimientos, que optaron por cerrar de manera definitiva ya que las instituciones educativas llevan un año sin actividad.
"Tenemos cifras de restaurantes cerrados de 310, muchos se encuentran en corredores universitarios que son los primeros en cerrar y todavía no tienen para cuando poder abrir. Consideramos que, de estos, el 20 por ciento son cierres definitivos, algunos están esperando un mejor momento, la reapertura de las universidades y las escuelas para reactivarse, son pequeñas loncherías, cocinas económicas”.
El cierre de establecimientos implicó la baja de cuatro mil empleos, en tanto que algunos están a la espera de reactivarse en cuanto cambie el semáforo epidemiológico y se permita mayor actividad económica.
La representante del sector restaurantero en el estado destacó que la actualización del decreto que permite a la industria de alimentos preparados poder operar los domingos con cierre a las 17:00 horas y ampliar la estancia de cuatro a seis comensales ayudará a mover la economía.
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