El gobierno federal tiene proyectado recaudar con la Ley de Ingresos 2016, 4 billones 694 mil 677 millones de pesos, un aumento de apenas 1 por ciento con respecto a la legislación aprobada en 2015, por lo que no se observa un desplome en los ingresos por la caída en los precios del petróleo.
Se espera que el entorno de menores ingresos petroleros se compense con el aumento en la recaudación de impuestos, la cual se proyectó en 3 billones 93 mil 148 millones de pesos, un aumento de 6 por ciento en comparación a lo que el gobierno mexicano espera percibir este año.
Destaca la recaudación del Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS) por 363 mil 081 millones de pesos, un aumento de 56 por ciento en comparación a lo establecido en la Ley de Ingresos 2015.
Se tiene contemplado que el IVA reporte un crecimiento más moderado en 2015, ya que la propuesta de Hacienda estableció para 2016, una captación de 739 mil 755 millones de pesos, un aumento de apenas 5 por ciento.
Por otro lado, el gobierno espera una caída significativa en la aportación de Pemex al erario público. Los ingresos de operación de empresas productivas del Estado, como Petróleos Mexicanos, se proyectaron en 2016 en 390 mil 757 millones de pesos, una disminución de 11 por ciento.
La Ley de Ingresos tiene el objetivo de contribuir a una disminución de 0.5 puntos porcentuales del déficit público en 2016, con el objeto de también reducir el endeudamiento del gobierno federal.
La propuesta de Hacienda establece que esta deuda gubernamental alcance los 520 mil 344 millones de pesos en 2016, una disminución de poco más de 9 por ciento, con lo estipulado en 2015.
