La ola de cambios en la regulación que surgió después y como resultado de la crisis financiera aleja cada vez más a los bancos de inversión de sus raíces. Ahora se involucran más en las actividades “con poco requerimiento de capital” que realizan también los sectores no bancarios.
Los planes estratégicos que dieron a conocer Deutsche Bank, Credit Suisse y Barclays son un ejemplo, pues todos se reposicionan hacia actividades como la asesoría sobre fusiones y adquisiciones y ayudan a sus clientes a obtener financiamiento. Se alejan de las actividades más tradicionales como los préstamos y las operaciones.
En unos cuantos años, las actividades centrales de estos bancos europeos de inversión no se van a distinguir de las de rivales que no realizan actividades bancarias, como algunos grandes gestores de activos, o las cuatro grandes firmas de contabilidad que ahora cuentan con divisiones de finanzas corporativas.
Las cifras de la consultora Tricumen muestran que tres de sus mayores firmas especializadas de asesoría -Greenhill, Evercore y Lazard- aumentaron 13% sus comisiones por asesoría para fusiones y adquisiciones desde 2007, un periodo en que se desplomaron los ingresos de los bancos de inversión más generales.
¿Es el futuro de la banca de inversión uno en donde son opcionales las actividades bancarias?
Manolo Falco, director de la banca corporativa y de inversión para Europa, Medio Oriente y África de Citi, dice que “no está claro si los bancos con ese modelo (de poco requerimiento de capital) lograrán buenos rendimientos”, dice. “Creo que es un terreno muy competido”.
Él cree que deberán tener una participación de mercado considerable para hacer que funcione el negocio de asesoría, y dice que eso tal vez no lo puedan lograr todos los bancos.
“Definitivamente tratamos de enfocarnos en las áreas más atractivas, pero al final, cuando estás en 55 países en esta región (Europa, Medio Oriente y África) tienes un gran negocio que también se enfoca en áreas que requieren mucho capital”, dice Falco de Citi.
Otros banqueros de inversión en grupos grandes de EU hacen lo mismo. Si bien la asesoría es a menudo mejor negocio en términos de retorno de capital, dentro de los bancos de inversiones, dicen que la capacidad de ganar ingresos de asesoría a menudo se apoya en los otros servicios que ofrece el banco, como los préstamos y las operaciones.
“Muchos clientes todavía necesitan una firma que pueda hacer una transacción global, no solo que ofrezca asesoría”, dice Daniel Pinto, director de banca de inversión y corporativa de JPMorgan. “La necesidad de capital no desaparece”.
El banco suizo, UBS, es el ejemplo más claro del “poco requerimiento de capital” que tienen muchos inversionistas. Desde la crisis financiera redujo más de la mitad de su balance y su banca de inversión cuenta con un rendimiento sobre el capital trimestral por encima de 20%. El banco todavía cuenta con algunas de las actividades bancarias tradicionales, pero las lleva a cabo con menor frecuencia que antes.
El jefe de banca de inversión de UBS, Andrea Orcel, dice que tiene un margen para ampliar el negocio sin más necesidad de recursos financieros, al mejorar la productividad tanto de las personas como de la tecnología. Para él, limitar el capital del banco de inversión impone una disciplina y lo mantiene enfocado en las áreas más rentables. El corretaje, dice, es un ejemplo donde UBS restringe sus recursos y logra un rendimiento sobre activos dos veces más altos que algunos de sus competidores.
“El entorno a nuestro alrededor cambia constantemente” dice Orcel, “así que necesitamos adaptarnos y encontrar maneras más eficientes y mejores para actuar y lograr resultados”.
Barclays, Deutsche Bank y Credit Suisse restringen sus actividades con alto requerimiento de capital, pero ninguno hace lo que UBS.
Michael Reuther, quien está a cargo de la banca de inversión de Commerzbank, dice que los cambios en este sector exigen una respuesta con mayores matices.
“Dentro del nuevo entorno regulatorio, la banca de inversión no es una cuestión de utilidad de operación neta o participación de mercado, sino un negocio para encontrar el equilibrio entre una gestión eficiente de recursos y mantener la oferta de los servicios y productos que tus clientes requieren”, dice y añade, que “ya no se trata de una industria en donde los negocios ofrecen todos los servicios”.