Las empresas mexicanas con políticas inclusivas LGBTQ+ alcanzan un 21 por ciento más de valor en el mercado y un 12.5 por ciento más de rentabilidad en comparación con aquellas sin dichas políticas, según un estudio de Buk.
La firma de gestión de talento también señaló que la inclusión de este grupo impulsa el 27 por ciento de los resultados financieros.
“La inclusión no puede quedarse en la superficie. Necesita traducirse en procesos de recursos humanos inclusivos, beneficios laborales equitativos y protocolos efectivos contra la discriminación”, afirmó Andrés Gómez, country manager de Buk México.
Detalló que el desafío está en pasar del rainbow washing a la acción concreta: revisar procesos de reclutamiento, capacitar en sesgos, utilizar lenguaje inclusivo, ofrecer licencias parentales neutras en género y reconocer la diversidad familiar.
También explicó que para que esto funcione la tecnología debe intervenir, pues hay plataformas especializadas que permiten gestionar selección, evaluación y clima organizacional de forma trazable, objetiva y libre de sesgos, convirtiendo la inclusión en una estrategia empresarial tangible.
Actualmente, el 71 por ciento de las empresas en el país ya cuenta con políticas formales de no discriminación, pero la percepción de igualdad de oportunidades para los colaboradores de grupos, como el LGBTQ+, es casi 25 por ciento menor que para el resto de colaboradores, según datos de Tecmilenio.
Los integrantes de este sector, según Tecmilenio, observan que las empresas no brindan igualdad de oportunidades. Además, la percepción de recibir un "trato digno" cae de 4.3 a 3.4 puntos cuando se consideran colaboradores LGBTQ+ o con discapacidad.