El gobierno de Estados Unidos informó que pidió bajo el Mecanismo de Respuesta Rápida del Tratado Comercial entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC) , que el gobierno mexicano dé la revisión de la supuesta negación de los derechos de los trabajadores en la planta de Draxton, esto por cuarta vez en 2023, y la novena vez en general.
México tendrá 10 días para acceder a realizar una revisión y, si lo hace, 45 días a partir de hoy para sus resoluciones.
A través de un anuncio público, la representante comercial de Estados Unidos, Katherine Tai, afirmó que el gobierno deJoe Biden le ha pedido a México que revise si a los trabajadores de una planta de Draxton en Irapuato, Guanajuato se les niegan los derechos de libertad sindical y negociación colectiva.
Esta no es la única solicitud que el gobierno vecino ha pedido a través de esta medida, ya que marca la novena vez que Estados Unidos invoca formalmente el Mecanismo Laboral de Respuesta Rápida en virtud del Acuerdo Estados Unidos-México-Canadá (T-MEC) y la segunda vez que lo hace como una acción autoiniciada.
“El mecanismo es una herramienta de aplicación efectiva para garantizar que los trabajadores en las instalaciones de Draxton pueden ejercer libremente sus derechos sin intimidación, hostigamiento o temor a represalias. Esperamos trabajar con el Gobierno de México para abordar de inmediato estas preocupaciones”, afirmó Katherine Tai, quien ordenó al secretario del Tesoro que suspenda la liquidación de todas las entradas de bienes no liquidados de la instalación de Draxton Irapuato.
El gobierno estadunidense afirmó que buscarán trabajar en estrecha colaboración con el gobierno mexicano para proteger la autonomía sindical y los derechos de los trabajadores a la representación sindical libre de interferencias externas.
En el documento informaron que interactúan con los trabajadores en México y monitorean su capacidad para ejercer su libertad de asociación y derechos de negociación colectiva, por lo que el gobierno estadounidense recibió información que parecía indicar varias denegaciones graves de los derechos laborales, incluido el despido de un dirigente sindical y la interferencia de actividades relacionadas con el fin de controlar el sindicato.
Detallaron que cuando los trabajadores de la planta intentaron organizar un nuevo sindicato, encabezado por el exdirigente, sufrieron hostigamiento, vigilancia e intimidación, y el ex dirigente sindical enfrentó amenazas y violencia.
Por lo que la Oficina del Representante Comercial de los Estados Unidos ha presentado una solicitud al gobierno de México para que revise si a los empleados de las instalaciones de Draxton se les está negando sus derechos laborales.
MRA