La industria automotriz y de autopartes en México brilla. Hay 18 plantas de armadoras globales que han aterrizado desde 1964, como la de Fiat Chrysler, y un par que siguen en construcción e iniciarán operaciones en 2019, como la de BMW.
México es el séptimo fabricante de vehículos en el mundo y el cuarto exportador. El sector recibió 39,319.3 millones de dólares (mdd) de Inversión Extranjera Directa de 1999 al segundo trimestre del 2015, lo que representó el 9.7% del total de IED nacional. Sin embargo, a las compañías les preocupa algo a futuro: la disponibilidad de mano de obra calificada.
La formación de recursos humanos es uno de los pilares de la industria en la que México tiene que aportar valor agregado para seguir siendo competitivo a nivel global dice el dirigente de la Asociación Mexicana de la Industria Automotriz (AMIA), Eduardo Solís.
Se estima que la producción de vehículos crecerá 60% en los próximos cinco años, y para resolver el problema de contar con el talento técnico que requerirá el sector a mediano plazo la AMIA trabaja con las instituciones de educación formal.
El alto dinamismo de la actividad automotriz en México lleva años, pero Solís calcula que su desarrollo en el siguiente lustro será significativo. Solo en el 2015 reporta la cifra récord de producción de 3.4 millones de unidades y tiene una marca histórica de exportación al llegar a 2.7 millones.
Las armadoras globales ven en el país un destino atractivo por su ubicación geográfica, acuerdos comerciales internacionales y extensa cadena de suministro, según la Secretarías de Economía. Encontrar el recurso humano especializado no ha sido, todavía, un problema severo, pero el desafío es qué pasará de aquí a cinco años.
En el 2020 se prevé que la industria produzca más de 5.1 millones de vehículos, y se requiere la existencia de programas de capacitación, educación y reclutamiento que continúen generando un equipo de alto desempeño enfocado a alcanzar las metas del ramo, opina Herman Morfin, director de Comunicación Corporativa de Nissan Mexicana.
La dinámica de crecimiento, que genera 2 millones de empleos directos e indirectos no va a la par con la oferta de los recursos humanos que necesita para su expansión. Las empresas e instituciones educativas buscan soluciones conjuntas para no frenar el desarrollo. Solís insiste en que el problema se resolverá de la mano de las instituciones educativas. “Lo importante es contar con mano de obra calificada tanto de técnicos como ingenieros para alcanzar la meta de producción estimada en el 2020”.
El líder de la AMIA dice que hasta ahora, el reclutamiento de personal no ha significado “un cuello de botella”, las firmas no quieren llegar a los extremos de no ocupar sus vacantes de empleo.
Mónica Flores, presidenta de Manpower para Latinoamérica dice que aunque por ahora no falte talento ello no significa que el personal contratado tenga las habilidades que la industria requiere. Por eso “casi todas las empresas cuentan con un programa de capacitación del nuevo personal, ya que consideran genéricas las habilidades que tienen los candidatos al momento de ser contratados”.
Según la encuesta de talento Manpower Group-Puestos Técnicos 2015, el costo de capacitación dentro de una empresa, aparte del salario, oscila entre los 5,000 o 6,000 dólares y hasta los 20,000 dólares por persona.
Para resolver este reto Solís preside el Comité Nacional de Gestión por Competencias de la Industria Automotriz que busca desarrollar los estándares de competencias y turnarlos al Consejo Nacional de Normalización y Certificación de Competencias Laborales (Conocer).
El Conocer promueve la integración de Comités Sectoriales de Gestión por Competencias responsables del desarrollo de Estándares de Competencia relevantes para la competitividad de los sectores productivos del país. Estos estándares dan señales al sector educativo para alinear y actualizar los programas de formación, haciéndolos pertinentes a las demandas de los mercados de trabajo.
Escasez y piratería de talento
Mientras no se encuentre la estabilidad en la existencia de talento el déficit de personal altamente capacitado rota en busca de mejores opciones laborales. Los trabajadores opta por una mejora salarial una vez que están calificados y esto incrementa los costos de las empresas, según la encuesta de Manpower.
Las empresas del sector ofrecen mayores sueldos e incentivos laborales para quedarse con los mejores prospectos, dice René Reyes, director de recursos humanos de Navistar. En el caso de Navistar, aunque encuentran talento calificado, el problema es que no hay suficiente para el crecimiento que viene. “Estamos entrando en una competencia muy agresiva contra empresas que también tienen centros de investigación o de desarrollo”, dice.
Según INEGI en 2014, los sueldos pagados en la fabricación de automotores y camiones fueron superiores a la manufactura en general. A pesos mensuales promedio, en la manufactura el sueldo es de 11,426pesos, mientras en la fabricación de la industria automotriz de 18,101 y en de vehículos pesados de 25,289 pesos.
En el Bajío las armadoras ofrecen sueldos por arriba de la ley y bonos para atraer y retener personal, dice Mario Hernández, Socio Líder del segmento IMMEX (Programa de la Industria Manufacturera, Maquiladora y de Servicios de Exportación) de KPMG.
La necesidad de talento aumenta igual que la escasez por el desajuste en los perfiles laborales ofertados y los requeridos. Según la encuesta de ManpowerGroup, las dos áreas en las que existe mayor necesidad de talento técnico es Producción-Operaciones (30.77%) y Sistemas-Tecnología (23 . 8%).
Las especialidades con mayor dificultad para el reclutamiento coinciden con las industrias de mayor crecimiento: Automotriz, Aeroespacial y Tecnologías de la Información, dice Flores. Pero, la mayoría de los puestos técnicos que se requieren, 34%, pertenecen al sector automotriz.
México necesita alrededor de 1.4 millones de técnicos para alcanzar la proporción de los países más productivos, según datos de ProMéxico.
El desafío para detonar el potencial del país y elevar la productividad es contar con un programa integral destinado a mejorar las competencias de los habitantes tanto en el plano educativo como en el mercado laboral. “Sigue siendo relevante que las habilidades adquiridas respondan a las necesidades del mercado”, dice Flores.
Frente a frente: MAZDA Y NISSAN
Dos armadoras asiáticas tienen diferentes formatos de capacitación para mantener y reclutar al mejor talento hoy, y asegurarse de conseguir más para el futuro.
El caso de NISSAN
Herman Morfin, director de Comunicación Corporativa de Nissan Mexicana, dice que la empresa no ha tenido problemas para encontrar al personal requerido todavía, pero impulsan el reclutamiento de una fuerza laboral altamente calificada con el desarrollo de programas de educación y capacitación. Su Global Training Center (GTC) de las Américas en la planta Aguascalientes A1 es el único centro de capacitación para la Alianza Renault-Nissan en el continente americano y el segundo Centro Global de Capacitación fuera de Japón.
Capacitación fuera de Japón
Desde 2001 en Aguascalientes tienen la Escuela Nissan para estudiantes de nivel técnico y profesional especializado en la industria automotriz. El modelo de la Escuela Nissan opera en colaboración con el gobierno hidrocálido y el Instituto de Educación del Estado y han egresado más de 1,000 estudiantes, de los cuales 40% es incorporado a la base laboral de Nissan. El resto puede integrarse a la base de proveeduría automotriz ubicada en Aguascalientes y la zona del Bajío.
En los últimos tres años, Nissan puso en marcha el más ambicioso programa de reclutamiento y entrenamiento para iniciar las operaciones de su planta Nissan Aguascalientes A2, inaugurada a finales de 2013. “En Nissan trabajamos para impulsar la generación de talento”, comenta Morfin
El caso de MAZDA
Keishi Egawa, Presidente y CEO de Mazda de México Vehicle Operation dice que hasta ahora los puestos gerenciales y especializados han sido el mayor reto de Mazda. Capacitan a su talento para transmitirles el Mazda Way que implica promociones dentro de la misma organización.
Uno de sus objetivos es dejar la planta en manos de mexicanos, para esto trajeron un equipo japonés a México y enviaron a mexicanos a Japón. “Hemos enviado a posiciones clave para enseñarles conocimiento técnico de sus áreas, teniendo como resultado un creciente número de promociones y desarrollo de capacitadores in-house”.
La empresa emplea a 5,200 personas. Hacen estudios de mercado para mantener los salarios competitivos y actualizarlos constantemente. No obstante, los incrementos salariales están directamente relacionados al desarrollo de la gente.
La empresa trabaja con diversas instituciones educativas para desarrollar el talento que lidere la industria automotriz en México.
Con infomación de David Segoviano