La Comisión Federal de Electricidad (CFE) afirmó que mantienen una “excelente” situación financiera.
En un comunicado, la empresa del Estado respondió al Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO), que advirtió sobre pérdidas entre 2021 y 2024, señalando que se trata de una visión limitada sobre las responsabilidades de una empresa pública como ellos.
“Se afirma que hubo ‘pérdidas’, sin considerar que un solo evento —la indisponibilidad de gas natural causada por una tormenta invernal en febrero de 2021— representó 42.7 por ciento de los números rojos de toda la administración anterior”, apuntó la CFE.
La empresa indicó que no se cuantificó el impacto económico que habría representado trasladar ese costo extraordinario a los hogares y a la industria mexicana, como ocurre en otros países.
“Si para ‘evitar pérdidas’ se deben cobrar a los usuarios finales los efectos de sucesos meteorológicos o geopolíticos imprevistos, esa no es ni fue la postura del Gobierno de México. Por el contrario, se actuó para que las tarifas eléctricas no subieran por encima de la inflación”, agregó.
Recordó que desde la administración anterior se estableció que la CFE debía operar con un enfoque social, más allá de obtener beneficios económicos, y que esa visión se mantuvo pese al incremento en el precio del gas derivado del vórtice polar en Texas, que representó un impacto de más de 70 mil millones de pesos, y del alza por la guerra entre Rusia y Ucrania.
Como medida preventiva, la CFE destacó que el Plan de Expansión del Sistema Eléctrico Nacional 2025 a 2030 contempla acciones para evitar que se repitan situaciones como la de 2021.
Además, subrayó que el nuevo marco normativo aprobado por el Congreso garantiza la prevalencia de la empresa pública, permite la participación ordenada de la iniciativa privada y busca fortalecer la confiabilidad y seguridad del sistema eléctrico.
En cuanto a los adeudos con proveedores, la empresa aseguró que mantiene una política financiera sana, con pagos en un plazo de 30 días, en cumplimiento de lo estipulado en la normativa y los contratos.
Explicó que el incremento observado entre diciembre de 2024 y junio de 2025 obedece a factores estacionales, como la ejecución de contratos, mayor actividad en obra pública y adquisiciones, así como a los procesos de validación y programación de pagos.
“La perspectiva hacia el cierre del ejercicio 2025 anticipa una reducción en el saldo de proveedores y contratistas, ya que el pasivo está alineado al calendario presupuestal, con mayor concentración de pagos en el último trimestre del año”, concluyó.