El retraso de la renegociación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), así como la presión por parte de Estados Unidos con aranceles, pueden generar un retraso en los flujos de inversión, afectar el tipo de cambio y aumentar el precio de materias primas, aseguró el Centro de Estudios Económicos del Sector Privado (Ceesp).
“Es evidente que conforme este problema se agudiza, se puede observar un retraso en el intercambio comercial, el aumento de precios de las materias primas y, posiblemente lo más preocupante, un retraso en los flujos de inversión”, aseveró en su análisis ejecutivo.
Expuso que si bien hay confianza de que se logre una negociación del acuerdo favorable para los tres países, aún no se tiene la seguridad de que los términos en que finalmente se pueda concretar favorezcan a México.
“Existe la posibilidad de que el TLCAN se concrete hasta 2019, por el retraso del periodo electoral en México y la cercanía de las elecciones en Estados Unidos, por lo que habrá un nuevo periodo de incertidumbre, ocasionando que algunas empresas retrasen sus planes de inversión en el país, y/o que los hogares se mantengan cautelosos en el consumo”, indicó.
Consideró que el sector privado, a través del “Cuarto de Junto”, deberá seguir con su contribución en el cabildeo, con el objetivo de que se retiren los aranceles impuestos y se evite una guerra comercial.
El Ceesp destacó que evidentemente esta preocupación podría agudizarse aún más en función de que el tiempo que se requiera para concretar la renegociación sea mayor, y la inseguridad económica aumente.
Agregó que la intranquilidad se genera por una mayor agudeza de las medidas proteccionistas de Estados Unidos, así como del riesgo de que la economía de México enfrente problemas de competitividad que limiten un buen desempeño de la actividad productiva.
“La intranquilidad de un entorno como este se puede reflejar en un efecto sobre el tipo de cambio, que tendría incidencia sobre la inflación, es probable que se observaran nuevos repuntes en la evolución de los precios al consumidor, afectando directamente el poder adquisitivo de los hogares”, indicó.
Actual equipo de TLCAN debe continuar
El Ceesp afirmó que la situación es compleja, ya que los resultados de la renegociación del TLCAN pueden tener un efecto adverso para el futuro de México.
“Por ello es necesario que el trabajo que realiza el equipo negociador actual continúe, ahora acompañado del equipo de transición del nuevo gobierno, en la búsqueda de las mejores condiciones”, indicó.
“Después de una suspensión temporal debido al proceso electoral de México, los trabajos de renegociación del TLCAN se reiniciarán antes de terminar julio, con la expectativa de que se pueda llegar a un acuerdo final en el tercer trimestre del año”, reiteró.
En ese contexto dijo que el sector privado deberá seguir contribuyendo con el objetivo de que se retiren los aranceles impuestos y evitar una guerra comercial que llevará al atraso económico de los países, no solo integrantes del TLCAN, sino del comercio internacional total.
GGA