Aleco Irarragorri Kalb cumple un año en la presidencia de Santos Laguna en medio de grandes retos que buscan revitalizar al equipo y devolverle el protagonismo en la Liga MX, además de la misión emprendida para recuperar la identidad y su conexión con los aficionados.
El 17 de octubre de 2024 asumió el cargo de mandamás del conjunto lagunero, entonces con 24 años, siendo el presidente más joven en la historia del futbol mexicano, tras relevar a Dante Elizalde, quien estuvo al frente del club durante cinco años.
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Se ha apegado a la metodología que comprende a la perfección, no solo por la influencia de su padre Alejandro, sino también por su cercanía con el trabajo diario en un equipo de futbol y su contacto con Santos desde los seis años, así que nadie puede cuestionar lo empapado que está del sentimiento albiverde.
Retos y decisiones en el banquillo
El directivo recibió la encomienda con un plantel que para muchos no merecía ser último lugar, pero tocar fondo supuso una oportunidad de empezar a resurgir y escalar paulatinamente en una competencia donde se ha descubierto más la brecha entre los llamados equipos grandes y los que luchan por clasificar al Play In.
La mentalidad de Aleco se centró en que el equipo mostrara un cambio basado en la intensidad y en retomar conceptos que lo llevaron a la grandeza. Por eso, en sus primeros días en la presidencia escuchó, analizó y luego tomó decisiones en conjunto con el Comité Deportivo de Orlegi, consciente de la responsabilidad que tiene en sus manos de llevar al equipo a buen puerto.
Con Nacho Ambriz como entrenador las cosas no resultaron como se esperaba, tampoco con Fernando Ortiz. Han sido dos torneos consecutivos en último lugar y eso ya tiene sus consecuencias, porque al término del actual torneo Apertura 2025 deberá pagar una multa económica por su ubicación en la tabla de cocientes y más adelante entrará en vigor el tema del descenso.
Un torneo con más disciplina pendiente
En el actual torneo, con Francisco Rodríguez Vílchez como estratega, Santos Laguna no ha logrado hacer el repunte esperado. Hay varios factores que han influido en la escasa cosecha de puntos, como la exagerada cantidad de expulsiones que ha tenido el equipo a lo largo de 12 fechas disputadas —seis en total—, además de actos de indisciplina como el de Franco Fagúndez, quien solo ha participado en un encuentro.
El conjunto lagunero se ubica actualmente en el penúltimo lugar de la clasificación con 10 unidades y, aunque matemáticamente tiene posibilidades de ingresar al Play In, su comportamiento en la mayoría de los partidos le brinda pocas oportunidades.
Irarragorri Kalb busca cambiar la forma de hacer las cosas y ser más intensos, dejar atrás lo que no ha dado resultado y fortalecer lo que se tiene, así como optimizar los recursos a la mano para recuperar terreno y que Santos vuelva a ser visto como ese rival incómodo al que hay que jugarle a tope para derrotarlo.
Se viene el cierre de torneo y este sábado ante León representa una buena oportunidad de incrementar sus aspiraciones, ante el técnico que Aleco tuvo de su lado cuando se convirtió en presidente de Santos Laguna.
e&d
