Si la cumbre del presidente de Estados Unidos, Donald Trump con Kim Jong Un pasa a la historia, podría ser por un hecho casi seguramente inédito: el líder norcoreano respondió a una pregunta espontánea de un periodista estadunidense.
Y momentos después, como para demostrar que no fue accidental, respondió a otra.
Con aire confiado y su voz habitualmente ronca, Kim respondió sin vacilar cuando un periodista acreditado en la Casa Blanca le pidió su opinión sobre las perspectivas de la cumbre:
"Todavía no se puede decir. No haré pronósticos, pero siento instintivamente que se producirá un buen resultado".
Here's video. Possibly the first time ever Kim Jong Un has answered a question from a foreign reporter. pic.twitter.com/BuzJYVe3bM
— Martyn Williams (@martyn_williams) February 28, 2019
Es posible que sea incluso la primera vez que el líder supremo de Corea del Norte contesta a la pregunta de un periodista, incluidos los de su país, donde los reporteros no preguntan sino que transcriben sus palabras sin cuestionamiento alguno.
En junio, Kim hizo oídos sordos a las preguntas durante su primera cumbre con Trump, en Singapur. En 2013, durante la inauguración de un museo de guerra en Pyongyang, le gritaron preguntas a las que no respondió.
El primer periodista que obtuvo una respuesta el jueves fue David Nakamura, del Washington Post, como miembro del grupo que tenía acceso cercano a los mandatarios.
"Pregunté a Kim Jong Un si confiaba en llegar a un acuerdo con @realDonaldTrump", tuiteó Nakamura. "Respondió: 'Todavía no se puede decir. No diría que soy pesimista'".
Asian Americans being asked "where are you really from?" -- I wrote a @PostStyle essay "Driving Me Mad" on that happening to me ... in 1995. https://t.co/1KzdH1ZC99 pic.twitter.com/aSkLF7axjf
— David Nakamura (@DavidNakamura) January 12, 2018
Poco después, al tener acceso al inicio de la última jornada de la cumbre, Kim respondió a preguntas de varios reporteros. Consideró que sería una buena idea abrir una oficina de enlace de Estados Unidos en Pyongyang y dijo a través de un intérprete que no estaría en Hanói si no estuviera dispuesto a hablar sobre la desnuclearización.
Los intérpretes, Yun-hyang Lee, por Trump, y Sin Hye Yong, por Kim, cumplieron una función crucial.
Por lo general, las preguntas a los gritos no se traducen, pero ya que Trump respondía, parecía natural que Kim hiciera lo propio. Los intérpretes tradujeron e interpretaron. Adicionalmente, Kim se prestó al juego.
jos