La familia de la estudiante universitaria de San Diego, Sara Saadat, presentó una demanda por homicidio culposo contra una aerolínea ucraniana, asegurando que la aerolínea debería haber conocido los peligros de operar en el espacio aéreo al volar sobre Irán y ser alcanzado por un misil.
La demanda fue presentada el jueves ante la Corte Federal de San Diego, a pocos días del segundo aniversario del accidente del 8 de enero de 2020 mató a Sara Saadar y a otros 175 pasajeros que tenían vínculos con Canadá.
Saadat, de 23 años, era estudiante de doctorado en psicología clínica en la Alliant International University, una pequeña escuela privada en Scripps Ranch. Compró sus boletos para Ukraine International Airlines en San Diego para el viaje a visitar a su familia en Irán.
Sara Saadat debía regresar a San Diego, para comenzar el semestre de primavera con paradas en el camino en Kiev, Ucrania y Canadá, minutos después de salir del aeropuerto de Teherán, el avión fue alcanzado por el misil lanzado desde tierra de Irán.
El Cuerpo de la Guardia Revolucionaria Islámica de Irán admitió más tarde haber disparado dos misiles, diciendo que el avión fue identificado por error como un "objetivo hostil", resultado de una mala investigación para ejecutar el lanzamiento del misil.
El accidente también acabó con la vida de la hermana Saba Saadat, que estudiaba ciencias en la Universidad de Alberta en Canadá, y a su madre, Shekoufeh Choupannejad, obstetra y ginecóloga que trabajaba en el norte de Edmonton, Canadá.
La demanda, presentada por el padre de Saadat, Addas Saadat, y el hermano, Armin Rei Collosi, argumenta que la aerolínea decidió partir a pesar de las numerosas advertencias de cielos inseguros y agresión abiertamente hostil entre Irán y otros países en los días y horas previos al accidente.
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