Políticos demócratas criticaron hoy a los candidatos republicanos Jeb Bush y Donald Trump por utilizar el término peyorativo de "bebés ancla" para referirse a los hijos de inmigrantes indocumentados nacidos en Estados Unidos. "¿Por qué no 'bebés', 'niños' o 'ciudadanos estadunidenses'?", escribió hoy en su cuenta de Twitter la candidata demócrata Hillary Clinton.
El término "bebés ancla" es un modo despectivo de referirse a los niños de indocumentados que supuestamente funcionan de "ancla" para sus padres, ya que al nacer en Estados Unidos los menores acceden a la ciudadanía.
La congresista demócrata Linda Sánchez, presidenta del Caucus Hispano del Congreso (CHC), consideró las declaraciones de los candidatos republicanos un "ataque personal" hacia ella y hacia la comunidad hispana de Estados Unidos.
"Me parece bastante irónico que los republicanos piensen que la segunda enmienda (el derecho a portar armas) está blindado, pero por alguna razón la decimocuarta enmienda (el derecho a la ciudadanía) está abierta a la interpretación", dijo en una conferencia telefónica Sánchez, de origen mexicano.
Trump, que parte como favorito en la primarias republicanas, abogó esta semana por negar la ciudadanía automática a niños nacidos en Estados Unidos de padres indocumentados, un derecho protegido actualmente por la decimocuarta enmienda de la Constitución. "Debemos averiguar si los 'bebés anclas son ciudadanos, porque mucha gente piensa que no lo son", dijo el miércoles Trump, quien comparte esa opinión.
Bush también utilizó el miércoles el término de "bebés anclas". Al ser consultado hoy por la prensa en New Hampshire acerca de si se arrepentía de haber usado ese término, Bush dijo: "No, no me arrepiento". El ex gobernador de Florida, que está casado con una mexicana y habla bien español, no quiere poner fin a la ciudadanía por nacimiento, pero quiere que se apliquen leyes más severas contra quienes abusen de ese derecho.
"Si hay abuso...si mujeres embarazadas están llegando para tener bebés simplemente porque pueden hacerlo, entonces deberían aplicarse las leyes de manera más vigorosa", dijo Bush en un programa de radio conservador. "Esto es el lado legítimo de esto. Una mejor aplicación de la leyes para que no tengamos estos 'bebés anclas', como se les llama, viniendo al país", añadió el ex gobernador.
Los partidarios de modificar la decimocuarta enmienda argumentan que hijos de inmigrantes indocumentados que obtienen automáticamente la ciudadanía estadunidense pueden funcionar como patrocinadores de sus padres para que obtengan la ciudadanía cuando ellos cumplan 21 años.
Expertos en inmigración explican que para lograrlo deberían esperar a que sus hijos fueran mayores de edad, regresar a su país de origen, lograr que su hijo solicite la reunificación familiar, realizar una entrevista consular y pasar un chequeo de antecedentes penales.
La espera, según de The Washington Post, sería de entre 24 y 31 años para entrar legalmente en el país y todavía más tiempo para obtener la residencia permanente o la ciudadanía estadunidense.
A diferencia de otros países, Estados Unidos se rige por el llamado principio de "ius soli" (derecho de suelo, en latín), por lo que concede la ciudadanía estadunidense a todos los nacidos en su territorio, sin que importe la nacionalidad o el estatus legal de sus progenitores. Otros países se rigen por el llamado "ius sanguinis" (derecho de sangre).
De este modo, un niño nacido en Estados Unidos obtiene automáticamente la nacionalidad, aunque sus padres sean inmigrantes indocumentados o estén en el país, por ejemplo, de turismo.
El término de "bebés anclas" ("anchor baby", en inglés) comenzó a utilizarse en los años 80. El Pew Hispanic Center estima que 340 mil de los 4.2 millones de niños nacidos en Estados Unidos en 2008 eran hijos de inmigrantes indocumentados, lo que equivaldría a un 8 por ciento del total.
Jeb Bush, "sinvergüenza"
La presidenta del bloque de congresistas demócratas hispanos, Linda Sánchez, calificó hoy a Jeb Bush de "sinvergüenza" por haber usado el término peyorativo de "bebé ancla" para describir a ciertos hijos estadunidenses de padres no ciudadanos.
"Desde el fondo de mi corazón veo a alguien como Jeb Bush, quien debería de estar consciente de lo que dice, y, sabes, lo único que se me viene a la mente es el término español "sinvergüenza", alguien sin un ápice de vergüenza que ataca a niños de esta manera", dijo Sánchez en inglés durante una conferencia telefónica con reporteros.
Esta tarde en Nueva Hampshire, Bush defendió el uso del término "anchor baby" y dijo que no lo considera ofensivo. "Dame un mejor término y lo usaré", replicó Bush al ser presionado por la prensa.
Sánchez dijo que tomaba los comentarios de Bush de forma personal porque sus padres son de México y ella nació en Estados Unidos. "¿Esto me hace una 'anchor baby'?", se preguntó retóricamente la congresista de California.
"No hay palabras para decir lo horrible que es atacar y tratar de criminales a niños, especialmente hijos de padres inmigrantes porque nuestro país es una nación de inmigrantes", agregó.
Los comentarios de Bush ocurren después de que Donald Trump, quien va a la cabeza del grupo de aspirantes republicanos a la presidencia, se pronunció en favor de abolir el derecho a la nacionalización automática al nacer en territorio estadunidense. Bush ha dicho que apoya este derecho.
Bush y Trump polemizan
Ayer, Trump y Jeb Bush hablaron en eventos separados en New Hampshire, coronando un día de campaña en ese estado que celebra votaciones tempranas en las primarias.
En Derry, Trump llenó un auditorio con capacidad para mil personas en una escuela secundaria, incluyendo público en salas adyacentes. El multimillonario comenzó sus críticas a Bush en un encuentro con reporteros y continuó en la asamblea.
Varios sondeos nacionales muestran a Trump al frente de los aspirantes republicanos — 17 en total — incluyendo Bush y el gobernador de Wisconsin Scott Walker, otro de los favoritos. "No veo que sea elegible", le dijo Trump a reporteros antes del mitin, y más adelante describió a Bush como una "persona de poca energía" a la que le cuesta trabajo conseguir resultados.
"No lejos de aquí tenemos a Jeb", dijo Trump, provocando abucheos de partidarios entusiastas. Trump se burló de Bush por "caer como una roca" en los sondeos iniciales en el estado y no conseguir entusiasmar a sus seguidores. "¿Saben lo que pasa con la gente de Bush?", preguntó Trump. "Está durmiendo".
En tanto, en la vecina Merrimack, Bush, que previamente se había mostrado renuente a atacar a sus rivales, describió al multimillonario como un demócrata alzador de impuestos del que los votantes se cansarían pronto. "Pienso que al final la gente va a votar por un líder conservador probado con experiencia", dijo Bush en un video divulgado por su campaña.
El ex gobernador de Florida criticó a Trump por sus contribuciones financieras pasadas a demócratas, además de sus posiciones cambiantes en asuntos como impuestos y su previo respaldo a un sistema de salud financiado por el gobierno.
"Él ha atraído a mucha gente. La gente está furiosa por la forma en que Washington no funciona", dijo Bush. "Pero cuando le gente mira su historial, no es un historial conservador". Trump y Bush, que sigue siendo favorito entre los donantes establecidos, han chocado frecuentemente por sus posiciones sobre diversos asuntos, incluyendo migración, en semanas recientes.
La esposa de Bush, Columba, nació en México y él ha dicho en el pasado que las personas que entran ilegalmente al país lo hacen como un "acto de amor" por sus familias.
Trump, que ha dicho que está a favor de deportar a quienes entran ilegalmente al país y de la construcción de un muro enorme en la frontera, se ha burlado de esa posición. Trump defendió el miércoles su uso del término "bebés ancla" para referirse a niños nacidos en Estados Unidos de padres que residen en el país de forma ilegal.
Bush, mientras tanto, criticó los planes de inmigración de Trump argumentando que "no es un plan conservador" porque costaría decenas de miles de millones de dólares.