Walter Montoya llegó a Cruz Azul en diciembre de 2017, proveniente del Sevilla, siendo el jugador que heredaría la casaca '10' del equipo, la cual había ocupado Christián Giménez desde el Bicenternario 2010.
Sin embargo, bajo el mando de Pedro Ciaixinha, el argentino no tuvo los minutos y las oportunidades que hubiese deseado en La Máquina durante sus dos torneos de estancia, cuestión que recalcó en entrevista con FOX Sports.
“Cuando jugué en Central fue la plenitud, en España me llevó Jorge Sampaoli, pero salió al poco tiempo. Luego en México me tocó jugar en otra posición que no es la mía, me tenía que adaptar a todo. Me arrepiento un poco del paso que tuve por México, porque se me prometieron cosas que no se cumplieron, sobre todo en lo familiar", dijo Montoya.
En este sentido señala al estratega portugués y a Ricardo Peláez como los máximos culpables de que su paso por nuestro paso por nuestro país no fuese el mejor, aclarando que el presidente, sus compañeros y la afición se portaron muy bien con él.
“Yo tuve dos problemas en Cruz Azul; uno fue Pedro Caixinha y el otro Ricardo Peláez. La verdad es que la gente que trabaja en el club, la hinchada, el presidente y los chicos del plantel son unos fenómenos, pero ellos se portaron mal conmigo y lo que más me dolió fue que no tuvieron los huevos suficientes para hablarme a la cara", sentenció.