Sergio Bueno Rodríguez, entrenador de futbol profesional, ha vivido de todos en el mundo del futbol. El técnico colimense ha estado en etapas difíciles, peleando por no descender, luchando por formar jugadores como en Atlas o gozando las mieles de llegar al Cruz Azul, aunque duró menos de un torneo en La Noria.
Sergio Bueno habló con La Afición sobre la llegada de Grupo Orlegi a Colomos y sentenció que un tipo como Alejandro Irarragorri es importante para una institución como la rojinegra, pues es una mente brillante que le gusta hacer sociedades para que el equipo se beneficie en todos los aspectos y le deseo éxito con el conjunto tapatío.
¿Qué puede esperar la gente del Atlas con la llegada de la gente de Alejandro Irarragorri?
“Sí, me tocó que fuera mi presidente cuando estuve con el Santos, porque a mí me tocó la clausura del viejo Corona y la apertura del Territorio Santos Modelo, llegué a sustituir a Daniel Guzmán que hizo un gran trabajo, primero los salva del descenso, luego los hace campeones, pero como pasa hay equipo que pasan por un camino oscuro y ese periodo lo estaba viviendo el Santos con jugadores de un gran cartel, que te puedo decir, Oswaldo Sánchez, el Chato Rodríguez, Lorito Jiménez, el Negro Ludueña, Chucho Benítez, Matías Vuoso, Quintero, un equipo con pesos pesados y el equipo estaba en declive y a mí me tocó llegar, revertir la situación y el rumbo del club, me tocó inaugurar el proyecto del nuevo estadio, en verdad muy ambicioso, ahí conocí a Alejandro donde uno detecta esa visión, esa capacidad de buscar hacer crecer las cosas, porque primeramente se adentró en el mundo del futbol, porque creo que era un novato en el medio cuando él incursiona, no quiere decir que no sea un tipo pensante, entonces conoció el medio y de inmediato vio que tenía que generar alianzas comerciales, involucró grandes empresas en La Comarca empezando por el soporte de Grupo Modelo, que después se desvinculó, pero ya tenía abrazado a empresas muy relevantes como Peñoles, Soriana, Lala, el mismo gobierno y para eso se necesita hacer una gran gestión, un equipo de trabajo importante y eso le permitió hacer crecer al Santos a un gran nivel. Yo dirigí al Santos en dos ocasiones, en el 2003 después de que Quirate fue campeón y estaba de presidente Cantú, para colmo me ha tocado relevar técnicos campeones, que no es fácil, porque los jugadores dicen, si fue campeón para qué lo corres, me tocó en aquel tiempo con Jared, Pony, Carlos Cariño, los Rodríguez, Caniza, el Pity Altamirano, y era una organización manejada por Memo Cantú y tenía cinco personas trabajando y lo hacían espectacularmente, pero en el futbol actual se necesita manejar muchas áreas y en ese sentido Alejandro es un monstruo, pero creo que me quedo corto, pero él ha de tener más de 100 personas en el club”.
¿Qué le puede aportar Alejandro al Atlas?
“Esa visión, de explotar una gran marca como es Atlas, que no se ha catapultado, al nivel que corresponde, es una censura en buen plan para los antiguos dirigentes del club, que no tuvieron esa gran visión, pero hubo intentos, siempre frenados por las mismas peleas internas. Siempre entre ellos mismos tuvieron obstáculos para poder tener al Atlas en otra forma, poder explotar a la cantera rojinegra, que siempre ha sido invaluable, ha generado ídolos, capitanes de la selección, jugadores internacionales, jugadores figuras de otros clubes que han regado su talento en el mundo como Pavel Pardo, Rafa Márquez o Andrés Guardado”.
“En Cruz Azul me quisieron imponer alineaciones”
Sergio Bueno, entrenador quien en 2015 dirigió al Cruz Azul, recordó su etapa como técnico de los Celestes y reveló la manera en que le metieron jugadores cuando era estratega de los cruzazulinos y además sentenció que le querían meter la mano en las alineaciones y agregó que el problema principal de la Máquina es que mucha gente se niega a perder su coto de poder y se olvidan que la prioridad es el equipo.
“Todo mundo quiere prevalecer y ahora no lo están permitiendo, de un tiempo para acá cuando se volvió insostenible la situación, pero a mí me tocó vivir en un periodo de mucha dificultad en ese sentido, porque si tocamos el meollo del asunto, vamos a evidenciar muchas cosas, que ya se han comentado, que ya se saben, que es un secreto a voces, que todo mundo sabe”.
¿Te impusieron jugadores ahí?
“No necesariamente, yo siempre he sido un técnico muy respetuoso de mi área, cuando a mí me quieren imponer jugadores me voy, pero hay muchas maneras de meter jugadores, no es que me hayan dicho, éste llega porque llega, yo daba una lista de 15 candidatos para una posición y a lo mejor me llegaba el 18, porque los 15 que yo propuse, todos se cayeron en el camino. No aceptó, el club lo puso muy caro, en el camino, todos se bajan, que en migración no los bajaron pasar, que no tenía pasaporte vigente y de pronto te dicen el jugador que era tu opción 18, estoy exagerando, resulta que aterriza hoy por la mañana en la Ciudad de México, si era mi opción sexta, por qué llega y los otros no, y empiezan a suceder este tipo de cosas, que es un tema que parece muy simplón, para eso hay que tener un gran talento para ese tipo de cosas, pero luego hay gente que no se dan cuenta, pero llega a ocurrir. Qué pasó, yo venía de buenas temporadas con Jaguares, lo agarré último en el descenso y los dejé en sexto lugar porcentual. Decidí dejar Jaguares y tenía cuatro opciones, ni siquiera tenía en mi radar a Cruz Azul, tenía ofertas de Puebla, Morelia, León, antes de acabar ese torneo y del Atlas, acaban de despedir a Tomás Boy, pero decido moverme y aparece Cruz Azul, llegué sabedor que tenía muchos contratiempos”.
¿Pero fue peor de lo que imaginabas?
“No, pero al final del día siempre digo que hay gente que cree que van a perder su coto de poder. Pero yo no soy tonto, no llego a los clubes a poner serrucho, como se dice por ahí. Soy un buen entrenador y si tiene una buena estructura de trabajo, la respetas, si a mí me contrata un director deportivo, me debo a esa persona, no es que yo sea trepador o que busque correr al que me llevó, pero no, diferente en Chiapas donde yo era el todólogo, era el vicepresidente deportivo y era técnico, tenía esos dos cargos. Dicen en los programas que el director técnico debe rendirle cuentas al director deportivo, pero eso depende del club, porque quiero ver en un club de talla mundial que pase, eso, quiero ver que Guardiola le rinda cuentas a su director deportivo o que le pida informes a Guardiola. Yo soy profesional y entrego informes porque siempre lo hago, a todas las áreas uno tiene que entregar informes, pero son temas presentes siempre. En Cruz Azul fue un paso efímero, la verdad fui muy golpeado, desde antes de mi llegada ya me tenían corrido, hablan de grupos pagados contra Caixinha, quien llegó a una final por el título, se queja de los pagados, cuando yo llegué tenía 50 pagados detrás de mi banca, después eran 300 que ya pedían que me corrieran de ese club que es particular. Lo tengo que decir, es un club hermoso, todos quisiéramos estar en el Cruz Azul, hay etapas donde se juega bien y nadie se quiere ir, pero la presión mediática genera una losa contra los jugadores nuevos, se les cargan los 20 años sin títulos. Estuve diez juegos y mi rendimiento era el mismo que el de Paco Jémez, Tomás Boy o Caixinha y a mí me echaron porque en ese momento había gente que quería incidir de otra forma, porque yo no me dejo que me impongan alineaciones, pero olvídate, es imposible”.
¿Te quisieron poner alineaciones en Cruz Azul?
“Ahí y en todos lados, eso pasa en el futbol, es muy común. Imposible que me metan mano en una alineación, mejor me retiro. Si hiciera un historial de cómo me contrataron y de cómo me despidieron haría una novela y acabaría con muchas conjeturas, de que éste no rindió en tal club y por eso lo echaron o mentiras a medias y alrededor de la historia, he dirigido a 18 equipos”.
¿Quién te quería meter la mano en las alineaciones en Cruz Azul?
“Podría decir nombres, es una lista interminable, pero te decía, de todos los cargos, hasta periodistas, porque hay periodistas promotores, directivos que quieren, es más hasta autoridades, alcaldes, todo mundo quiere incidir, porque el futbol seduce”.
¿Volverías al Cruz Azul?
“Sí, por qué no. Caixinha también perdió mal la final, la perdió con poco espíritu del equipo, pero hay que entender que hay cosas que se salen de la jurisdicción del técnico, que tu preparas algo de cierta forma. Porque Corona le entregó muy forzado a Marcone, quien debió reventarla a cualquier lado”.
Y más porque es el mejor contención de Argentina, ¿no?
“Más o menos, no, no y no, no es que no me guste, es un tipo competitivo y rendidor, pero lo dimensionaron más de lo que era, eso pasa en cualquier parte del mundo. Acá lo catapultaron y dices acá hay un interés particular, no sé si en el caso de Marcone, a lo mejor a ti te encantaba y te terminaron seduciendo. De Argentina no es el mejor, me gusta más Guido”.
¿Pizarro o Rodríguez?
“Yo creo que los dos, me gusta más el del América porque tiene agresividad, tiene más agresividad en la marca, y Pizarro le falta más marca, él tiene más manejo de pelota, jugaba de interior o detrás del nueve, de hecho ha mermado esas características que tenía desde Argentina, yo alguna vez lo quise traer a San Luis, pero pues no llegó, ahora lo observo jugar y hago una crítica constructiva, pero antes jugaba mejor, le diría juega para adelante papá, antes le gustaba pisar el área, tiraba paredes, pateaba al arco y ahora juega muy lateral, juega mucho para tras, que es una gran virtud mantenerla posesión de la pelota porque te seduce, te duerme y después te mata, pero Pizarro antes era más vertical, y esos jugadores tienen un valor mayor, ahora juega más a la segura”.
SRN