El caso de Camila, la niña de tres años que fue declarada muerta, velada viva y quien murió de camino a un hospital en San Luis Potosí— desencadenó ayer denuncias de otras familias afectadas por las malas prácticas del personal médico de la clínica comunitaria de Salinas.
En redes sociales una usuaria identificada como Priscila Díaz sostuvo que vivió una situación similar con su hijo, a quien llevó de urgencia al mismo hospital por deshidratación y vómito, pero los doctores no autorizaron administrarle suero.
“En ese hospital no tienen ética, son inhumanos y poco profesionales, te dejan morir”, escribió en su cuenta de Facebook.
Otra usuaria identificada como Adriana Galaviz relató que también fue víctima de negligencia, mientras que varias familias se unieron a la exigencia de justicia por la muerte de Camila.
El secretario de Gobierno de San Luis Potosí, Guadalupe Torres, llamó a las víctimas a interponer denuncias ante las instancias correspondientes.
“Les pido a los afectados que denuncien de manera formal, que no dejen las cosas en el tema mediático de las redes sociales”, exhortó el funcionario.
En tanto, la madre de Camila, Mary Jane Mendoza, acudió ayer ante el agente del Ministerio Público del municipio de Salinas para interponer la denuncia contra quienes resulten responsables por la muerte de su hija.
La menor fue ingresada el 18 de agosto al Hospital Comunitario de Salinas con un cuadro de diarrea y deshidratación, y dos horas después fue declarada muerta.
Mary Jane llegó al Ministerio Público acompañada de una abogada asignada por la presidencia municipal de Villa de Ramos, quien le asistió legalmente durante las cuatro horas que duró la toma de su declaración.
Camila fue declarada muerta la madrugada del miércoles pasado y horas después fue trasladada a la comunidad de La Herradura, ubicada en Villa de Ramos, para ser velada por familiares.
En pleno funeral, su abuela se dio cuenta de que respiraba, por lo que fue llevada al mismo hospital, donde personal médico la canalizó a la capital del estado. La menor murió en el camino de edema cerebral, falla metabólica y deshidratación, de acuerdo con la segunda acta de defunción.
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