Como hace dos años, la muerte volvió a tocar la puerta del Pueblo Mágico de Tacámbaro, luego del asesinato de Salvador Chava Bastida García, presidente municipal, y su escolta, Pastor Cortés Álvarez, ocurrido a la medianoche del viernes.
"Fue muy raro porque Chava siempre, siempre pasaba adelante con el chófer, siempre. Y ahora no... ahora Chava venía atrás, y él siempre traía los vidrios abajo, y ahora los vidrios estaban arriba. Fue horrible, horrible. Y lo peor, ¿sabes qué? Es que oyéndose los disparos tan bien y la policía no venía, no venía", recordó una vecina.
Sobre la calle de Fuentes de Loreto aún hay manchas hemáticas, y la cinta de seguridad fue retirada tras las primeras investigaciones de la Fiscalía General del Estado, que confirmó que el edil fue asesinado al arribar a su domicilio.
Asimismo, una patrulla de la Guardia Civil y otras más del Ejército resguardaban el lugar.
Una mujer, cuya casa está a dos más de donde vivía el alcalde, recordó el horror que vivió durante varios minutos tras el ataque armado. Dijo que el alcalde solo utilizaba un par de escoltas y una camioneta blindada para trasladarse.
"(Los atacantes) se fueron para allá abajo... Este, mi sobrino llamó a la Policía, y siempre llegan con su escandalazo y rápido... y no, ahora no, se tardaron mucho en venir, mucho... A mí se me hizo eterno. Nosotros con tantísimo miedo", dijo.
Bastida García y su escolta, adscrito a la Guardia Civil, perdieron la vida a menos de 50 metros del lugar donde, en octubre de 2023, sufrió un atentado el hermano de Artemio Moriya, alcalde en aquel entonces, dejando un saldo de cinco muertos, entre ellos una madre buscadora.
En Tacámbaro, las escuelas, oficinas municipales e incluso la Dirección de Seguridad Pública permanecieron cerradas.
La gente intentó mantener su rutina diaria, abriendo sus negocios, y otros más se dieron el espacio para darle el último adiós a Chava, como le decían de cariño al alcalde, que horas antes de su muerte asistió a misa.
—¿Nunca se imaginó que pudiera pasar algo así? — se le pregunta a un adulto mayor que deambulaba por la plaza.
"No, pues qué se iba a imaginar. Pues ayer estuvo en La Parota. Según tengo entendido, estaba en La Parota y ayer hasta a misa fue, creo", respondió.
Decenas de personas, vestidas de negro, se dieron cita en la Fiscalía Regional para recibirlo entre lágrimas, porras y aplausos, para después acompañar el cortejo a un salón ejidal donde es velado.
"Para mí, era de los mejores el muchacho este, muy buena gente. No conmigo (solamente), con todos, muy buena gente, servicial, no orgulloso, no nada de eso... y no se sabe qué pasaría", agregó otro vecino.
A 24 horas del ataque armado no hay pistas de los presuntos atacantes, ni tampoco del estado que guardaban las investigaciones en contra del edil por sus posibles vínculos con el crimen organizado.
Las familias del presidente municipal y del escolta, adscrito a la Guardia Civil, anunciaron que este sábado serán sepultados en el panteón municipal, en privado.
MO
