La Arquidiócesis de Oaxaca emitió una condena unánime para reprobar el caso de la niña triqui que fue vendida por sus padres a un desconocido en 40 mil pesos, llamando a desterrar este tipo de prácticas que trasgreden y violentan los derechos fundamentales de las víctimas, principalmente de las niñas, que tiene el derecho a la felicidad.
El arzobispo de la Oaxaca, José Luis Chávez Botello, dijo que en este tipo de casos los padres de las menores no deben obligar a juntarse en matrimonio a esa edad a sus hijos bajo ninguna condición, "por qué no están preparadas, apenas están creciendo, y el cuerpo y su cerebro no está desarrollado, ni físicamente, ni psicológicamente para asumir una alta responsabilidad."
"Déjelos que vivan sus niñez, plena y feliz", dijo el prelado a los padres de familia y urgió al gobierno estatal empezar a discutir leyes sobre la familia.
"Sobre cualquier interés económico o político, las familias y las instituciones deben poner siempre en centro el respeto inquebrantable a los derechos de los niñas y las adolescentes".
En tanto la Defensoría de los Derechos Humanos del Pueblo de Oaxaca (DDHPO), dijo que vigila el desarrollo del proceso del juicio de controversia y custodia provisional o definitiva de la niña triqui con el fin de vigilar que las autoridades judiciales que atienden su caso, privilegien el respeto a sus derechos humanos, específicamente su dignidad como persona y su interés superior como niña, de acuerdo a las obligaciones internacionales que tiene el Estado mexicano.
La DDHPO se pronunció públicamente para que se reconsiderara la orden emitida por el Juzgado Segundo de lo Familiar de entregar a la menor de edad a sus padres, pues existía un riesgo fundado y motivado en contra de su integridad física y psicológica.
Este organismo público, autónomo y ciudadanizado inició el expediente DDHPO/CA/725/(01)/OAX/2013, el 16 de agosto del 2013 y desde entonces las acciones realizadas han tenido el fin de proteger los derechos humanos y la dignidad de la niña, es por ello que se encuentra vigilante del desarrollo del juicio de controversia y custodia provisional o definitiva que está realizando el Poder Judicial, esperando que defina con base a los estándares internacionales de derechos humanos, y que su resolución reconozca el carácter integral de los derechos de la niña y que estos prevalezcan sobre cualquier otro interés, así como que las disposiciones estén orientadas a la protección y desarrollo de la autonomía de la niña en el ejercicio de sus derechos.
El propósito único de la DDHPO está motivado en el tema de la defensa y protección de los derechos humanos, considerando que a través de este caso, se puede sentar un precedente en la entidad oaxaqueña, para que las instituciones actúen privilegiando el interés superior de las niñas y niños.