A temprana hora de este viernes, personal del Tribunal Unitario Agrario retiró una considerable cantidad de expedientes y documentos oficiales de las instalaciones ubicadas en la zona centro de Altamira, con apoyo de elementos de la guardia estatal.
La movilización ocurrió entre las 5 y 6 de la mañana, según testigos, quienes señalaron que los archivos fueron colocados en dos camionetas blancas que partieron presuntamente con rumbo a Ciudad Victoria, actual sede del tribunal agrario.
Desde el pasado 20 de febrero, campesinos de Altamira, González, Aldama y del norte de Veracruz mantienen tomada la oficina como medida de presión para exigir que el magistrado revierta el cierre de la sede en Altamira.
Alegan que dicha decisión afecta directamente a las familias que viven y trabajan en el campo, al dificultar el acceso a servicios jurídicos relacionados con la tenencia y uso de la tierra.
Campesinos continúan manifestación en Tribunal Agrario de Altamira
A pesar del retiro de los documentos, los campesinos continúan en manifestación reiterando su exigencia a las autoridades competentes para que se mantenga la presencia del Tribunal Agrario en la región. señalan que su lucha no cesará hasta obtener una respuesta favorable que garantice la atención directa en su zona.
La movilización fue liderada por el abogado Rubén Bernal, representante legal de los ejidatarios inconformes.
“Aquí la inconformidad de todos los compañeros campesinos es porque se están manifestando la inconformidad del cierre del Tribunal Agrario con residencia en la ciudad de Altamira.”

El abogado detalló que, antes, los juicios agrarios se resolvían en Altamira, pero ahora deben acudir hasta Victoria, lo que implica largos traslados y altos costos. Agregó que algunos afectados incluso provienen de estados vecinos, como San Luis Potosí, lo que hace más difícil su situación.
“Vienen hasta de San Luis, y cada vez son menos las oficinas que atienden estos asuntos. El traslado de expedientes complica la asistencia a audiencias y el desarrollo de los procesos legales debido a la lejanía y la falta de recursos de los campesinos. La gente no tiene ni para comer, menos va a tener para echarle diésel a los camiones para trasladarse”.
Explicó que los tribunales agrarios atienden disputas por tierras, conflictos de posesión y derechos de usufructo. Estos asuntos requieren la presencia física de los afectados y sus testigos, lo que resulta casi imposible bajo las nuevas condiciones.
BRR