Son cuatro de cada diez padres de familia los que no autorizan que se les apliquen las vacunas del papiloma humano a las niñas, informó la Jurisdicción Sanitaria Número 2.
Esteban Barrón Guardado, coordinador de la Jurisdicción, precisó que está problemática la han encontrado en las escuelas de Tampico y Ciudad Madero.
"No sabemos si las niñas no les dan los permisos, los pierden o los padres se niegan a aplicarles la vacuna contra el papiloma humano", explicó.
Remarcó que es necesaria la vacuna porque las niñas cada vez más jóvenes mantienen relaciones sexuales y esto propicia el contagio del padecimiento.