Aunque en su primer informe de gobierno anunció la conversión del MIB como Universidad de las Bellas Artes, el gobernador Alejandro Armenta aclaró que el inmueble de la Vía Atlixcáyotl aún destinará una parte de su espacio para mantenerse como museo.
"El museo no se pierde, nosotros no destruimos para hacer algo nuevo, no andamos haciendo eso por ningún motivo. El museo va a seguir ahí pero se tiene que abrir al público, los poblanos no conocen el museo, tenemos estudios que reflejan que la gente no se siente identificada", comentó.
Te recomendamos...
El titular del Ejecutivo estatal indicó que Museos Puebla evaluará si el acervo del Museo Internacional Barroco (MIB) se mantiene en el inmueble o se devuelve a su lugar de origen.
Dijo que la idea es que el museo sea un espacio accesible para las familias, pues su tarifa actual lo hace poco atractivo, mientras que su área de talleres y conferencias se adaptará para el proyecto de la Universidad de las Bellas Artes, donde se impartirán estudios en arquitectura, cine, danza, escultura, literatura, música y pintura.
Al respecto, adelantó que la escuela arrancará cursos en 2026 con turno matutino y vespertino y sin cobro de inscripción, aunque habrá cuota de recuperación similar a la de los tecnológicos estatales, con materias impartidas por cuatrimestre.
Además, las áreas verdes del Eco-parque Metropolitano, en la parte trasera del MIB, se usarán para impartir algunas clases al aire libre, previo acuerdo con Convenciones y Parques.
Quiere usar método MIB en el CIS
El gobernador Alejandro Armenta volvió a exhortar a la empresa Alfa Constructores, propiedad de los hermanos Abed, de aceptar un acuerdo con el gobierno de Puebla para finiquitar de manera anticipada el contrato de asociación público privada (APP) para la construcción del CIS de Angelópolis, fórmula que le sirvió con Grupo Hermes para que la administración dejara de pagar el MIB.
El mandatario amagó con recurrir a la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) para cancelar el acuerdo que el ex gobernador Rafael Moreno Valle pactó con los empresarios, a quienes se le adeudan 4 mil 300 millones de pesos por la obra, pese a los abonos anuales que hace el gobierno estatal desde 2012.
Señaló que el valor del Centro Integral de Servicios (CIS) no es equivalente con el contrato que se firmó, pues mientras él estimó que toda la obra pudo hacerse hasta con mil 500 millones de pesos, la administración morenovallista aceptó pagarlo en casi 7 mil millones de pesos hasta 2037, de los que apenas se han abonado 2 mil 617 millones de pesos.
Armenta advirtió que su gobierno podría decretar una moratoria de pagos para cubrir la deuda del CIS si los empresarios no acceden a negociar y se dijo dispuesto a aceptar su destitución si las autoridades judiciales dictaminan que entró en desacato por no mantener los pagos millonarios.
También adelantó que en las próximas semanas presentará los nueve contratos que gobiernos anteriores firmaron con empresas por obras inexistentes y, de las cuales, los tribunales ya fijaron una orden de pago que comprometerá las finanzas estatales.
CHM
