La Comisión Nacional de los Derechos Humanos investiga el caso del albergue La Gran Familia, ubicado en Zamora, Michoacán, lugar donde presuntamente se cometieron múltiples abusos y maltratos contra las personas ahí alojadas, entre ellas, menores de edad, que pudieran constituir violaciones a derechos humanos.
Tras la intervención de fuerzas federales y estatales en el albergue, donde se encontraban 596 personas, entre ellas 278 niños, 174 niñas, seis bebés recién nacidos y 138 mayores de edad, la CNDH dará seguimiento a la atención que reciban y su destino final.
De acuerdo con información recabada por personal de la CNDH, testimonios de testigos y de víctimas menores de edad que se encontraban en el albergue, señalan la existencia de abusos, maltratos físicos, alimentos en mal estado, e incluso que había un cuarto de castigos donde los internos eran obligados a permanecer por horas y sin alimentos.
Asimismo, menores que se encontraban en el albergue han declarado que además de las condiciones de hacinamiento e insalubridad, durante años sufrieron abuso psicológico y sexual.
Los padres de las personas internadas en la casa-hogar han señalado que desde hace meses se quejaron de las condiciones en que vivían sus hijos y pese a su solicitud de que los devolvieran, los directivos del albergue no los querían regresar.
Visitadores adjuntos y peritos psicólogos de la CNDH se trasladaron a ese municipio michoacano para conocer los testimonios y dar seguimiento a las investigaciones que realizan las autoridades ministeriales, así como para brindar apoyo psicológico a las familias y víctimas que lo requieran.
De igual forma, el personal de la CNDH otorgará orientación jurídica a los familiares y víctimas, y estarán atentos del seguimiento y tratamiento que se otorgue a las niñas y niños rescatados, por lo que se hace un atento llamado a las autoridades involucradas, a efecto de que se garantice la integridad física y psíquica de los agraviados y sus familiares.
La CNDH considera que la situación de vulnerabilidad y la violencia contra la población infantil, es un problema social y cultural que obstaculiza el ejercicio a su pleno desarrollo físico y mental, el cual empeora cuando son víctimas de actos que transgreden su dignidad y libertad sexual, entre otros derechos fundamentales.