General Motors México informó que el paro en su planta de Ramos Arizpe durará únicamente esta semana y obedece a trabajos de mantenimiento en las líneas de producción, por lo que descartó cualquier posibilidad de despidos, en respuesta a los rumores que circularon en redes sociales.
En un breve comunicado, la empresa negó que exista riesgo para los más de 7 mil 200 empleos en la planta, donde el cese temporal de actividades impactará a cerca de 3 mil 500 trabajadores, quienes reanudarán labores el próximo lunes 5 de mayo.

El anuncio se da en medio de un contexto económico complejo para la industria automotriz en México, afectada por medidas arancelarias del gobierno de Estados Unidos, particularmente para empresas transnacionales con operaciones en el país.
Por su parte, el Gobierno del Estado de Coahuila reafirmó la versión de la empresa a través de un comunicado oficial, en el que se detalla que la Secretaría del Trabajo mantiene coordinación permanente con el sector empresarial y sindical para asegurar los derechos laborales de los trabajadores durante este paro técnico.
“La empresa General Motors, instalada en la región sureste de Coahuila, iniciará la programación de mantenimiento de algunas líneas de producción, por lo que deberá detener temporalmente la producción de algunos de sus productos”, indicó el documento.
El sindicato de la planta también manifestó que el paro programado tiene como propósito preservar las fuentes de empleo y mantener en firme los derechos laborales adquiridos por los trabajadores.
En otro punto, el Gobierno del Estado aclaró que no existe información oficial sobre despidos masivos en la empresa Julian Electric, ubicada en Derramadero, la cual —según se indicó— continúa en procesos de contratación y búsqueda de talento en la región sureste.
edaa