El gobernador de Sonora, Alfonso Durazo, la fiscal general Claudia Indira Contreras y la secretaria de Seguridad Pública, María Dolores del Río Sánchez, se reunieron con familiares de Lucero Marisol Cuadras, la joven activista que fue asesinada ayer durante el ataque armado que se registró en el palacio de gobierno de Guaymas.
Las autoridades de Sonora les manifestaron su solidaridad ante el lamentable hecho, y les reiteraron el compromiso de hacer justicia.
Teresita, la madre de Marisol, pidió que su hija sea recordada como “una mujer muy entusiasta, altruista, impulsora de las energías renovables y de la no violencia contra la mujer”.
De acuerdo a un comunicado publicado por la Fiscalía Estatal, la familia recibirá atención y acompañamiento psicológico por parte de personal especializado del Centro de Atención a Víctimas (CAVID), de la Fiscalía sonorense.
El gobernador informó que tanto él como los altos mandos de seguridad del estado, además de mandos federales, se encuentran reunidos en Guaymas en sesión permanente, para darle seguimiento puntual a las investigaciones y conducir las acciones para dar con los responsables.
Tanto el secretario de la Marina, Rafael Ojeda Durán, como el gobernador Alfonso Durazo y la fiscal han confirmado que no fue un ataque directo a la alcaldesa, Karla Córdova, sino que el objetivo era el secretario de Seguridad Pública Municipal, Andrés Humberto Cano Ahuir, quien desde hace tiempo había recibido señalamientos y amenazas por parte del crimen organizado mediante videos y mantas colgadas en lugares públicos.
Para acelerar la investigación de estos hechos, arribaron al estado el titular de Inteligencia Naval y el jefe del grupo de Fuerzas Especiales de la Marina, además, llegarán 100 marinos adicionales para reforzar las tareas de seguridad, además la Policía Estatal incrementará su presencia con 200 elementos, quienes mantienen de manera coordinada un operativo permanente con las distintas corporaciones policíacas de los tres órdenes de gobierno.
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